Cuando escribo estas líneas no se conocen aún los nombres de las cuatro personas que el PP y el PSOE van a proponer para atender a la renovación parcial del Tribunal Constitucional que está pendiente desde hace un bienio. El plazo establecido por la Mesa del Congreso finaliza a las ocho de esta tarde y los entornos más dados a la intriga y el bisbiseo se han convertido en un auténtico hervidero de rumores y chismes. He recibido varias llamadas de gente que supone que debo estar informado sobre el particular, pero no he tenido más remedio que defraudarles a todos. No sé nada. Ni me importa, añado ahora. Hace ya más de dos años que escribí en este blog lo que pienso a propósito del modo en el que los socialistas y los populares gestionan el nombramiento de los magistrados del alto tribunal (Cfr. «Ya era hora», publicado el 02.05.10) y, visto lo visto, hoy no puedo sino reafirmarme, con más contundencia aún, si cabe, en las opiniones que entonces vertí.
El Tribunal Constitucional tiene encomendadas funciones de extraordinaria importancia en el sistema político español. Resuelve sobre la constitucionalidad de las leyes y dirime los conflictos de competencias que enfrentan al Estado y las Comunidades Autónomas. También conoce, por vía de amparo, de los recursos en los que se denuncia la violación de los derechos fundamentales y la libertades públicas. Su papel es, como se puede ver, de extraordinaria importancia en la resolución de algunos de los principales pleitos y controversias que pueden suscitarse en el marco constitucional. Vayan por delante algunos ejemplos. Tómese nota. Fue el Tribunal Constitucional el que dictó la sentencia que vació de contenido el Estatut de Catalunya (ver al respecto «Habemus sententia«, publicado el 29.06.10 y «Acatar la sentencia«, publicado el 06.07.10), el que avaló la Ley Orgánica de Partidos Políticos, el que recientemente ha reconocido a Sortu el derecho a constituirse como partido político, el que rechazó la Ley vasca de Consulta y el que resolverá, entre otros muchos, los recursos interpuestos contra la Ley del matrimonio homosexual y la Ley de salud sexual y reproductiva y sobre la interrupción voluntaria del embarazo.
Sin embargo, la designación de las personas que van a formar parte de un órgano de tan relevante cometido, se está cociendo, a puerta cerrada, en un marco rigurosamente bilateral, en el que sólo tienen cabida el PP y el PSOE. Puede parecer chocante, pero es así. Todos los demás quedamos extramuros. El problema es que un Tribunal Constitucional cuyos miembros son elegidos a través de un método tan cerrado, opaco y excluyente, articulado con el inequívoco propósito de que los dos únicos invitados a la mesa del señor puedan contar con sus correspondientes correas de transmisión en el órgano que dirimirá los grandes conflictos políticos del Estado, es un Tribunal Constitucional cuya legitimidad queda tocada desde la propia raíz. Los socialistas y los populares no pueden pretender que después del espectáculo que han dado durante los dos últimos años, haciendo públicas sus desavenencias y enfrentamientos en torno a la idoneidad de las personas propuestas para integrarse en el Tribunal, los demás, a los que no se nos ha dado vela alguna en este entierro, aplaudamos con ahínco el turbio acuerdo que ellos puedan alcanzar tras los gruesos muros de su impenetrable torre de marfil. No señor.
Claro que luego nos hablarán, con gesto cínico, de la necesidad de respetar las instituciones y de acatar las sentencias. Esas instituciones que ellos han maltratado, zarandeándolas sin contemplaciones y esas sentencias que serán dictadas con apariencia de objetividad e imparcialidad por quienes ellos -y sólo ellos- han elegido para tomar decisiones muy importantes, que nos afectan a todos.
¿Alguna novedad?
“es un Tribunal Constitucional cuya legitimidad queda tocada desde la propia raíz»
Ninguna novedad.
¿Donde situamos la raíz?
Josu, esto de las legitimidades y las raíces es una cosa que da mucho de sí ¿Verdad?
Y luego está la legalidad. No sé, si se trata de ponerse de acuerdo en cuanto a la realidad terrenal, yo creo que es más factible hacerlo con leyes que con rices. El terreno donde vamos a jugar es importantísimo, no lo discuto, pero una insignificancia en comparación con las reglas del juego. Otra cosa es lo de manejar sentimientos, ahí quizá sea más productivo echar mano de raíces y ensoñaciones más o menos camufladas en la tierra y de como queremos que sean los frutos que nos vaya dando el arbolito convenientemente podado y abonado.
Si, a mí tampoco me gusta el Tribunal Constitucional, probablemente por razones diferentes a las tuyas. Pero no es lo único.
Ejemplo: Que el peso especifico de un voto -en definitiva es con lo que al final nos hacéis las leyes- dependa del chiringuito autonómico donde se emite, a mí no me parece muy legítimo que digamos (¿o debería decir racional?).
Yo, al igual que tú, también creo que en España (perdón, ya sabes, quise decir estado español) no faltan leyes injustas, caprichosas, estúpidas y hasta alguna que otra vomitiva.
¿Que hacemos?
¿Respetamos escrupulosamente todas y cada una de ellas exactamente igual?
Saludos cordiales
Propongo nueva denominacion para el TC:
Sindicato de Recadistas Judiciales del PPSOE (SRJP)
Los finlandeses, que son cuatro pero son soberanos -me descojono por no llorar cuando oigo o leo a los iluminados del PNV decir que no tiene sentido crear un Estado cuando vamos a la integración europea-, repitiendo el mismo discurso que arguye el PPSOE para decir wue Euskadi no debe ser un Estado-,dicen wue están hasta los huevos y que no, que no les parece nada bien eso de dar dinero por nada a los corruptos españoles.
Los finlandeses dicen que ellos han renunciado al Guggenheim-Helsinki porque les parece supercaro, pero que una cosa es ser puta y otra es además poner la cama, y que eso de que el PIG futbolero tenga Guggnheim en una ciudad española de nombre «Bilbao» (» Qué bonito se ve en las fotos! Hay muchos tablaos flamencos en esa ciudad española? Qué cine más bueno hace Almodóvar!») y encima tenga 3000 Kms. de tren-bala y que encima estën construyendo otros tropecientos con su dinero es demasiado.
Pues como no nos importa y la división entre legislativo, ejecutivo y judicial es una mera utopía comentaré una películas Watchmen (por lo de who watches the watchmen). Muy buena y mejor banda sonora….. Aunque me quedo con el homenaje que el hombrecillo azul hace a Espinete.
Todo el m undo recuerda que el único atuendo de Espinete era un pijama que se ponía a la hora de dormir y que el resto del día lo pasaba como dios lo trajo al mundo. Pues bien el hombrecillo azul se pasa toda la peli en modo Espinete salvo en Vietnam, en donde aparece repartiendo estopa convertido en un coloso super él pero con unos boxer … Vamos que se pasa toda la peli en plan comando salvo cuando forma parte de uno. Gran homenaje a Espinete (que en la vida real debió casarse con Txema o eso dicen).
¡Seguro que algún despistadillo no se había dado cuenta!
Por intentar comentar algo que no se sepa…..
Me corrigen… y rectifico:
Debe aparecer en un par de momentillos con traje y no lleva boxers, usa slips. Hala! Hecho!
Pues lo que pasa en Gipuzkoa con Bildu (que ya está desertizando el territorio con su política antiempresarial y demagógico-trágica) es todavía peor. No tienen mayoría. Solo controlan 22 de los 51 escaños de las Juntas Generales. Pero quieren pasarse los acuerdos del parlamento por el arco del triunfo. Pasan del Parlamento de Gipuzkoa, que es el máximo órgano representativo de la voluntad de sus ciudadanos. Es decir, pasan de la democracia. Sólo los antidemócratas pasan de los mandatos del Parlamento.
Pues bien, cuando el Parlamento reacciona y pone en marcha los mecanismos que tiene a su disposición para reprobar al Gobierno (en este caso la moción de censura individual contra el diputado foral Alduntzin), Bildu responde como si estuviera en la oposicion: con una cartelada y una manifestación de acoso contra los líderes de los partidos que impulsan la moción. Es chavismo puro. Acoso a la oposicion (e incluso hostigamiento personalizado contra sus líderes) para que dejen de hacer oposicion y acepten mansamente los dictados de un Gobierno sin mayoría. Es una técnica nazi. ¿Alguien se acuerda de la noche de los cristales rotos? Así empezaron los nazis. Hostigando desde el poder a los potenciales opositores. Y acabaron como acabaron.
Pobre Gipuzkoa. En pleno siglo XXI atenazada por una banda dictatorial de chavistas antidemócratas, que quieren llenar el territorio de basura.
Daniel, como siempre, confunde la velocidad con el tocino y aprovecha la ocasión para barrer para casa. La casa española, claro. El cortijo rojigualda, que oculta tras el brillo de un balón hábilmente manejado por once multimillonarios, las miserias de una economía hundida y sin solución. ¿Qué tendrá que ver la ley, que es por definición, expresión de las mayorías parlamentarios de cada momento y por eso mismo, mutable y cambiante, con una institución como el Tribunal Constitucional que está llamada a ser el árbitro del sistema? La ley es por definición, parcial, aunque deba buscar el interés general. El Tribunal Constitucional, por el contrario, o es imparcial o no sirve para nada.
Los finlandeses tienen de soberanos, los mismo que Oskar Matute (lider de referencia del amorfo conglomerado Bildu) tiene de abertzale. O sea, nada. En Europa,los paises que se encuentran por debajo de Alemania en el PIB, hace tiempo que perdieron la soberanía. España, desde luego, tiene de soberana, lo que Alduntzin de respetuoso con el Parlamento de Gipuzkoa. Ni un chavo. Lo mismo se puede decir de los paises intervenidos (Grecia, Portugal, Irlanda) y de los que, sin estar intervenidos, pintan poco o nada en el convierto europeo, como Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Malta, Chipre, Italia, Austria y la propia Finlandia. Todos han cedido soberania a Europa (o no han tenido más remedio que hacerlo, para ser más exactos) para poder formar parte del club de la prosperidad.
La izquierda abertzale no debe fijarse en Finlandia, sino en Cuba. Cuba es el Pais del mundo que más celosamente guarda su soberania frente a las agresiones imperialistas exteriores. Pero lo suyo es soberania para ser pobre y miserable. Lo mismo que quieren los de Bildu. Una Euskal Herria soberana para enterrarla en la basura y condenarla a la pobreza.
Los finlandeses, que son pocos pero cuentan con un Estado independiente, son la coartada (con la ayuda de los holandeses, brabanzones, frisios y austrìacos, que también son pocos pero tienen otros dos Estados independientes más) de Alemania, que saca a sus alfiles a pelear contra el gorrón hispano y han conseguido así hoy que Dragi, desde Fráncfort, diga que no hay dinero para los rojagualdos.
Lso finalndeses han renunciado a la implementacion del Guggenheim-Helsinki porque les parece una pasta en estos momentos (a Fnlandia, sí, no a Grecia), y acaban de ver en directo por TV cómo los españoles se dan la gran vida en Ukraina levantándose de fondos públicos 300.000 EUROS por barba de Alonso, Martinez, Ramos, Casillas, Inesta y Torres.
Los finlandeses tienen Estado y estån poniendo en aprietos al gorrón hispano que tiene Guggenheim y que encima tiene la jeta de estar contuyendo un tren-bala de 12000 millones de Euros ahí.
Luego el PNV dice que eso de tener un Estado es anacrónico, que no sirve para nada…
¿Europa? ¿Has dicho Europa, Donatien? ¿Desde cuando se interesa la izquierda abertzale por la Unión Europea ultraliberal fundada sobre el mercado y la libre competencia? Lo que hay que leer por tener ojos.
La izquierda abertzale siempre ha querido una Europa soviética, en la que se niegue a los ciudadanos la propiedad privada sobre los medios de producción y la economía se planifique desde el Estado en planes quinquenales. Pero eso del mercado y la libre competencia siempre le ha parecido una mindonga. Igual que el de la soberanía, que es un concepto burgués, que sirve para engañar a los descamisados del mundo, haciéndoles creer que son dueños de sus destinos, cuando en realidad están presos de las estructuras económicas capitalistas, cuya opresión no conoce fronteras.
Supongo que ahora que han decidido españolizarse, levantar la bandera española en el ayuntamiento de Donostia, en la Diputación de Gipuzkoa y en la casa consistorial de Lizartza y asumir la legislación represiva del Estado con la cabeza gacha y el rabo entre las piernas, habrán decidido, también que los nuevos tiempos justifican la aceptación de la Europa capitalista e imperial, con sus superestructuras conceptuales y milongas opresivas.
El manifiesto comunista hablaba del fantasma que recorría Europa. La izquierda abertzale ya se ha olvidado de él. Seis meses pisando moqueta y ya se han integrado en el capitalismo. Ahora, hasta montan empresas para recoger basuras, que dan empleo, con dinero público, a militantes de Batasuna. EA, tampoco en esto se come un rosco.
Para que quieren los espanoles un TC ?
Al final siempre hacen lo que les da la gana !
Yo no sé cuando ha dicho el PNV que eso de tener un Estado sea algo anacrónico. Lo que yo le he oído decir lo que cientos de analistas, académicos y pensadores del mundo vienen constatando desde hace décadas: que el mundo evoluciona, que el Estado-Nación pierde protagonismo, que las soberanías pasan de ser únicas a ser compartidas (y en algunos casos hasta ficticias), que el modelo de Westfalia está periclitando y que un nacionalista vasco tiene que estar atento a lo que ocurre en su entorno para acomodar sus objetivos a la realidad y no estar reclamando en el siglo XXI, algo que ha dejado de existir a lo largo del siglo XX. Como también he oído decir a la izquierda abertzale que el modelo político por el que apuestan es el de la Albania comunista o el de la República Democrática Alemana. De hecho, ahora acarician el modelo chavista del socialismo del siglo XXI y nunca han dejado de emparentar con el castrismo cubano.
En Europa, Finlandia manda lo mismo que Luxemburgo: nada. Amenaza con abandonar el euro si no le hacen caso cuando niega su apoyo a los países del sur, pero luego corrige lo dicho (como la izquierda abertzale ha corregido aquello de que no hay que poner banderas españolas, ni participar en el Parlamento vascongado, ni asistir a las instituciones españoles, ni respetar la legislación represiva española, etc, etc, etc) y dice que no va a abandonar el euro. Su capacidad para boicotear la utilización urgente de fondos de rescate es muy reducida: basta una mayoría cualificada del 85% para conceder con carácter de urgencia esos fondos de rescate. Finlandia no llega al 5%. Es lógico que su gobierno se dedique a hacer fintas boxeísticas, sin golpear, porque actúa bajo la estrecha vigilancia de los Auténticos Finlandeses, un grupo neonazi, xenófobo y eurófobo que no quiere saber nada con Europa.
Lo que sorprende es que desde la izquierda abertzale se sintonice con un grupo neonazi, autoritario y de simbología fascista que ha nacido en Finlandia para boicotear la solidaridad intraeuropea.
Aunque, puestos a pensarlo mejor, igual resulta que no sorprende tanto.
DM-L:
Pues si Finlandia es tan fuerte ya sabes lo que puedes hacer. Pedirles que se planten ante Rajoy y Hollande y les obliguen a sentarse a negociar con ETA la amnistia de sus presos y el futuro comunista de Euskal Herria. Si ser un Estado te da tanto poder para presionar y chantajear a todos los demás, ¿Por qué Malta y Chipre siguen sin pintar nada en el concierto europeo?
No nos engañemos, en Europa manda más el Kommerzbank que Alemania.
“con una institución como el Tribunal Constitucional que está llamada a ser el árbitro del sistema? La ley es por definición, parcial, aunque deba buscar el interés general. El Tribunal Constitucional, por el contrario, o es imparcial o no sirve para nada.”
Farfulla, haces honor a tu nombre. Confieso que no me queda claro si es que te lo haces o lo finges (no sé que es peor, je, je).
Sencillamente, la imparcialidad humana no existe. Anda, piensa un poquito y quítate la pesada boina euskérika de la cabeza, eso siempre favorece un poco la actividad mental, hazme caso.
Ah, y no mientas, el T C ha servido por ejemplo para que los simpatizantes de los verdugos de Miguel Ángel Blanco estén mandando hoy en San Sebastián.
Saludos cordiales
Daniel, te retratas como modélico español. Dices que la imparcialidad no existe. Claro que no existe. No existe, en España, que está entregada al sectarismo y a la parcialidad. Como tú. Si la imparcialidad no existiese en ninguna parte de globo, el mundo seria una mierda tramposa. Pero la imparcialidad, afortunadamente, existe. Donde no existe es en España. Pero vosotros, los españoles militantes, pensáis que el mundo es como España, pero un poco más grande. Lo veis todo, a traves del cristal españolizante se vuestras orejeras patrióticas. ¡Venga hombre! Abre un poco los ojos y descubre la realidad que se abre má allá de tu visión flamenca de las cosas.
Venga, Daniel. El TC, no ha tenido más remedio que dar la libertad a Sortu. No quería, como buen españolista que es, pero la amenaza de que el tribunal europeo le desautorizara, le ha llevado a hacer lo que ha hecho. La verdad es que España está quedando ante Europa como una democracia de ínfima calidad. Una pseudo democracia.
«Dices que la imparcialidad no existe. Claro que no existe. No existe, en España, que está entregada al sectarismo y a la parcialidad. Como tú»
Farfulla, si exceptuamos la infalibilidad de Gregorio XVI, conviene quedarse con el principio de indeterminación de Heisenberg y acomodar nuestros procesos mentales a la terca realidad de los comportamientos humanos sin que esto signifique que «el mundo sea una mierda tramposa».
La imparcialidad absoluta no existe en esta vida, como no existe la belleza absoluta, ni la verdad absoluta: Siempre que hay humanos por el medio, la perfección, sencillamente, no existe. Pero bueno, allá tú.
Algunas formas contundentes de pensar son relativamente interesantes dentro del ejercicio intelectual, lo malo es que a veces dan paso a acciones contundentes… es lo malo que tiene.
Saludos cordiales
Sumusu,
El maltés es idioma oficial de la Unión Europea, para quien el euskera es una lengua no oficial, y solo la menciona para llamarla «minoritaria».
Finlandia, por su parte, zya se independizó hace tiempo, y por supuesto tiene un ejército que etå para garantizar su libertad nacional, su ETA particular, pero ni Rajoy ni Hollande tienen prisioneros finalndeses sobre los que negociar nada.
«Venga, Daniel. El TC, no ha tenido más remedio que dar la libertad a Sortu.»
Burduntzi, el reduccionismo de vuestros razonamientos ha llegado a tal estado paranoia, que resuelva lo que resuelva el TC, la cosa está mal. Mal si se pronuncia en un sentido y mal si se preonuncia en el contrario. Y después os fumáis un puro y que viva la Real ¡ahi va Dios!
Deberíais aliviaros un poco ese cabreo crónico y dejar de miraros permanentemente la barriga; por grande que sea (el ombligo), ahí no cabe la mínima coherencia necesaria para funcionar con normalidad!
Saludos cordiales
Daniel, como es costumbre en él, habla sin conocimiento de causa pero viéndolo todo con el irresistible matiz españolizante que tanto distorsiona su visión. Dice que «el peso especifico de un voto -en definitiva es con lo que al final nos hacéis las leyes- dependa del chiringuito autonómico donde se emite, a mí no me parece muy legítimo que digamos (¿o debería decir racional?)». Debería saber que el peso específico del voto en su querida tribu española no depende del «chiringuito autonómico» en el que se emite y lo más probable es hasta que lo sepa. Pero como le gusta la demagogia (es normal, ha expresado muchas veces su simpatía por Rosa Díez, la reina de la demagogia) lo repite una y otra vez. La circunscripción electoral en la tribu española es la provincia, no el «chiringuito autonómico». Y la provincia es la quintaesencia de la división territorial en el modelo centralista español del siglo XIX. Tomada del modelo jacobino francés.
A Daniel le disgustan las desigualdades dentro de España, pero le importan un comino las desigualdades entre un español y un húngaro, porque su referencia es España y sólo España. Su universalismo acaba en la frontera de la piel de toro. Al otro lado está el extranjero y no va con él.
Lo que a mí me fastidia es que en España haya tribunales que administran la igualdad y la desigualdad según les interese a los dos partidos mayoritarios. Eso es infinitamente más grave que el hecho de que haya desigualdades establecidas en la ley. Porque la ley se cumple o no según les interese. La fotografía que ha puesto Erkoreka para ilustrar el blog me parece muy ilustrativa. Recoje la frase que todos nos hacemos cuando el PSOE y el PP nombran árbitros que dirimirán el juego según sus intereses particulares.