En alguna ocasión he escrito sobre las diferentes estrategias con las que el vasquismo y el catalanismo políticos han desarrollado su actividad política en Madrid. Como la guerra de sucesión arrumbó con el régimen foral de Catalunya, durante los siglos XVIII, XIX y parte del XX, la política catalanista ha sido una política de carácter eminentemente proyectivo, empeñada en reformar la estructura institucional y territorial de España con el fin de que los catalanes pudieran sentirse más cómodos en su seno. Los vascos, por el contrario, disfrutamos de los fueros hasta 1876. Y aun después, hemos venido gozando de un régimen fiscal de raíz foral -el Concierto Económico- que sólo ha conocido el paréntesis excepcional que Franco abrió en 1937 con las dos provincias traidoras. La política vasquista ha sido, por ello, más bien defensiva; rigurosamente fuerista. Dicho sintéticamente: mientras los catalanes se afanaban en proponer reformas de carácter general con el propósito de reorientar la estructura del Estado hacia un modelo reformado en el que ellos pudieran tener un encaje más satisfactorio, los vascos nos dedicábamos a defender con uñas y dientes el tasado autogobierno que aún nos quedaba (ver, entre otros, «Catalanes y vascos en las Cortes españolas«, publicado en este blog el 21.09.09) Todo ello, claro está, sin perjuicio de que durante todo este dilatado período de tiempo, haya habido catalanes y vascos que, pese a su origen, hayan consagrado su vida pública a hacer política estrictamente españolista.
Estas diferentes trayectorias del catalanismo y del vasquismo políticos, han influido de modo no desdeñable en las estrategias políticas posteriormente implementadas por los correspondientes nacionalismos. Las inercias tienen su peso. El nacionalismo catalán ha seguido conservando mucho del carácter proyectivo que inspiró el catalanismo de los siglos precedentes. Y hasta tiempos muy recientes, sus planteamientos políticos estaban preñados de propuestas concebidas para reformar el Estado español con el fin de propiciar su mejor acomodo. Al nacionalismo vasco, por el contrario, siempre se le ha reprochado el hecho de carecer de un proyecto «para» España y de disponer, en todo caso, de un planteamiento «contra» España. El nacionalismo catalán nunca ha dudado de la conveniencia de participar en las elecciones generales y de integrarse -cuando la apertura democrática lo hacía posible, evidentemente- en las instituciones centrales del Estado. Todavía hay quien se sorprende cuando se entera de que el líder independentista catalán, Lluys Companys, posteriormente fusilado por las huestes de Franco, fue nada menos que ministro de Marina en la segunda mitad de 1933.
Entre los nacionalistas vascos, por contra, siempre ha habido reticencias en todo lo que tiene que ver con la participación en la política española. De hecho, no concurrimos a las Cortes hasta 1918. Y años después, tal como hice notar en otro post hace unas semanas (vide «Sopas sin sorber no puede ser», publicado el 05.01.12), todavía seguía el criterio de no implicarse en la política española más que en la medida en que ello fuera estrictamente indispensable para la defensa de los intereses vascos, en general y, más concretamente, para avanzar en el autogobierno. En aquella época, la participación en el Gobierno español era, sencillamente, inimaginable para el nacionalismo vasco. El caso de Irujo fue una excepción sólo explicable por la situación de guerra.
Desde 1977 -al menos en el caso del PNV- estas reservas se pueden dar por desaparecidas. Tampoco Euskadiko Ezkerra, en su tiempo, puso reparos dignos de reseña a la idea de implicarse plenamente en la actividad parlamentaria de las Cortes. Así lo atestiguan la hemeroteca y el propio Diario de Sesiones. Con EA, hasta 2008, ocurría exactamente lo mismo. Como ese año perdió el único escaño que le quedaba, no se puede decir mucho más. Sólo las formaciones surgidas la izquierda abertzale seguían, según las épocas y las estrategias de cada momento, poniendo peros a esa participación.
Empero, desde 2011 todo ha cambiado. Ahora sí, la izquierda abertzale participa sin complejos en las elecciones generales del Estado español y envía a sus diputados y senadores a ocupar escaño en las cámaras legislativas que representan, según reza la Constitución, «la soberanía del pueblo español».
Mucha gente me pregunta en la calle por el tipo de actividad parlamentaria que los diputados de Amaiur llevan a cabo en el Congreso. «Pues allí están», suelo responder. «Como todos los demás. Ocupan sus escaños, miden bastante sus intervenciones y votan lo que les parece pertinente». Ayer, un amigo me preguntó específicamente si participan en los debates «estrictamente españoles». Le respondí que sí. El debate de investidura es un debate «estrictamente español». ¿O no? Y los que versan sobre los recortes y las medidas de austeridad que está adoptando el Gobierno de Rajoy son, también, debates «estrictamente españoles». Y Amaiur está participando en todos ellos sin reserva alguna. Porque el problema es que, nos guste o no, queramos o no, también nos afectan a los vascos que residimos al sur del Pirineo. Hace poco citaba un ejemplo en este mismo blog, al referirme al futuro de nuestros astilleros (vide «Sobre el futuro de nuestros astilleros«, publicado el 21.02.12). Un debate general sobre el tax lease en el Estado español, interesa, por supuesto, a los astilleros gallegos, andaluces y levantinos, pero interesa, también, a los miles de trabajadores vascos que están empleados en este sector. Y ampararse en que se trata de un debate español, para inhibirse del asunto, equivale a desentenderse del negativo efecto que puede producir en los ciudadanos de Euskadi.
Entonces, mi amigo prosiguió: «¿Y no hay casos en los que se desentienden del asunto sometido a debate?». Mi respuesta fue nuevamente afirmativa. En ocasiones, efectivamente, se desentienden del asunto. No votan. Están sentados en sus escaños, pero no activan el botón que acredita su presencia en el hemiciclo. No es que voten abstención, sino que se abstienen de votar. Con lo que el efecto final es idéntico al que se produciría si no estuvieran presentes en la sala: en el panel de luces que refleja el resultado de las votaciones, la luz correspondiente a sus escaños no es ni verde, ni roja ni naranja, porque no se enciende. Permanece apagada, como si estuvieran ausentes. «Lo que ocurre -añadí- es que yo, al menos, no alcanzo a comprender cuál es el criterio con arreglo al cual disciernen entre los asuntos «estrictamente españoles» en los que votan -sí, no o abstención- y los asuntos «estrictamente españoles» en los que se abstienen de votar. Y le puse un ejemplo. En el último Pleno, debatimos y votamos las propuestas de resolución presentadas por los grupos parlamentarios en relación con el Consejo General del Poder Judicial. Un asunto «estrictamente español». Amaiur presentó una propuesta. Versaba sobre el establecimiento «como requisito para la función jurisdiccional en la Comunidad Autónoma Vasca y la Comunidad Foral de Navarra el conocimiento y aprendizaje del Euskera, con la finalidad de garantizar en la administración de la Justicia los derechos lingüísticos de todas las personas». Ese día se debatieron hasta siete iniciativas con reivindicaciones similares relacionadas con los derechos lingüísticos de los ciudadanos. Estaban firmadas, aparte de la suscrita por Amaiur, por IU, ERC, CiU -que registró dos- PSOE y PNV. Pues bien, los diputados de Amaiur votaron que sí a la suya y a la de ERC, pero se ocultaron bajo tierra en todas las demás. Se hicieron los ausentes. Seguro que tienen algún criterio para distinguir entre las unas y las otras. Pero a mí me parece inextricable.
Aupa Lehendakari! ¿Ha probado usted a preguntarle a Leire Pajín si existe alguna relación entre el «ánimus votandi» de Amaiur y las conjunciones planetarias esas? Gracias!
Jua, Jua, Jua, no me digas, Josu, que Amaiur ha presentado en el Congreso una propuesta que habla de la Comunidad Autónoma Vasca y de la Comunidad Foral Navarra. No me lo digas, por favor, que me troncho. Vivir para ver. ¿Se lo has dicho a Donatien? Jua, Jua, Jua. Es que me saltan las lágrimas de tanto reír. Se han pasado la vida dandonos lecciones de abertzalismo radical y coherente, para ahora irse a Madrid como corderillos, a llamarle majestad al rey y a reconocer la división de Hego Euskalherria. Jua, Jua, Jua…
Ustedes son nacionalistas y violentos, les importa una higa ser nacionalistas españoles o ser nacionalistas vascos, el caso es ser nacionalista. Para el resto de España, que sean sólo nacionalista vascos esta vez, es una bendición, ya que de esta manera su nacionalismo agresivo se queda allí acotado y no contamina otras partes de España.
Ustedes a lo suyo: quemar banderas y pitar al rey ¡Qué gran contribución a la humanidad la vuestra!
Cuando el lobo va a hurtar, lejos de casa va a cazar.
Quien con lobos anda a aullar se enseña.
O sea que iban a Madrid a exigir por primera vez en la historia la soberanía total para Euskal Herria y se dedican a repetir propuestas como la de la euskaldunización de la judicatura que se han debatido mil y una veces en el Congreso, en el Senado y hasta en el Parlamento Europeo. ¡Pues menudo chasco! Para dedicarse a esas cosas, que les vote su abuela.
Para inextricable, el criterio por el que se guía la izquierda radical vasca a la hora de imponer a lo ciudadanos el método atez-ate. ¿Qué les lleva a apostar por un sistema que sólo tiene inconvenientes, empezando por el inconveniente de que es cinco o seis veces más caro? Estoy deseando que los gipuzkoanos empiecen a comerse su propia basura. ¡¡No a la renovación del convenio con Bizkaia!!. Y que las casas de los que han votado a Bildu se parezcan a las de los que padecen síndrome de diógenes. Llenas de basura medioambiental.
Ya ha empezado a bajar el turismo en Gipuzkoa. Son cifras oficiales. Es el efecto Bildu. También ha empezado la fuga de capitales. Nadie quiere que sus cuentas personales y tributarias estén en manos de izquierdistas radicales partidarios de los métodos de Stalin. La invasión de la basura pondrá la guinda final.
EAJ-PNV acusa a Bildu de tratar de imponer “a la
desesperada” su modelo de recogida de basuras
Ante el anuncio de Bildu de poner en marcha el sistema de recogida puerta a
puerta en aquellos municipios donde tienen mayoría absoluta, el PNV
manifiesta: que:
– Supone una falta de respeto el que dicho anuncio se realice en una rueda de
prensa en vez de hacerlo en las correspondientes ayuntamientos.
– La izquierda abertzale -que siempre ha abogado por poner en marcha
procesos de participación ciudadana en cuestiones de toda índole-, ahora,
decide imponer este sistema de una forma autoritaria, sin consultar ni permitir
la participación de la ciudadanía.
– El sistema puerta a puerta no soluciona el problema del tratamiento de la
fracción resto, ya que siempre existirá una fracción final que no se puede ni
prevenir, ni reciclar, ni compostar.
– El puerta a puerta no evitará la existencia de vertederos o de la incineradora.
En este sentido, hay que advertir que si la izquierda abertzale decide seguir
adelante con el sistema puerta a puerta en los términos en los que lo ha
planteado se puede producir un colapso de los vertederos gipuzcoanos.
– El cambio de sistema conllevará un importante incremento del gasto corriente
en los municipios con alcaldes de Bildu. La recogida puerta a puerta puede
llegar a triplicar el gasto de recogida de la basura, con un alto impacto en las
arcas municipales y en los bolsillos de las familias gipuzkoanas.
– La izquierda abertzale está engañando a los gipuzkoanos respecto a los
resultados de este sistema porque oculta el hecho de que seguirá
necesitándose una incineradora o la ampliación / reapertura de vertederos. Por
ahora, lo único que sabemos es que con este sistema ha nacido un nuevo
fenómeno denominado “turismo de basura”, que consiste en que, por ejemplo,
en Antzuola se “hayan esfumado” el 40% de los residuos urbanos durante
2011. En definitiva, nos están imponiendo un sistema que no soluciona el
problema.
– Entre los años 2000 y 2010, en Gipuzkoa, la recogida selectiva de residuos
urbanos ha pasado del 17,4% al 43,31%. Estos datos demuestran que en
pleno siglo XXI la apuesta por el reciclaje debe basarse en la concienciación y
la educación, y no en la imposición –como pretende Bildu- y que el trabajo
realizado hasta ahora es el camino a seguir en consonancia con los modelos
de gestión de residuos más avanzados de Europa.
En definitiva, nos encontramos ante un intento de Bildu de imponer su
modelo de recogida de basuras. Marcado el objetivo de evitar la
incineración, Bildu se lanza a la desesperada hacia una estrategia que, en
una primera fase, contempla la imposición del puerta a puerta, sin definir
ni presentar el modelo completo.
Bildu actúa a la desesperada, gestionando hoy un absurdo y mañana, si
no se pone remedio, un caos.
Por todo ello, el PNV exigirá mecanismos de participación ciudadana que
puedan culminar en una consulta, en todos aquellos municipios en los que
Bildu ha anunciado el sistema “puerta a puerta”.
No es de extrañar que la actitud de nacionalistas vascos y catalanes sea distinta, porque sus orígenes históricos son distintos. Los territorios vascos fueron parte de Castilla desde que Castilla existe y parte de España desde que España existe. Los Fueros, al mismo tiempo que reconocen y respetan una idiosincrasia diferente en los territorios vascos, su misma existencia es prueba fehaciente de la pertenencia de dichos territorios a Castilla. El nacionalismo nació allí recientemente, de forma artificial, como una actitud negativa, de rechazo de la propia identidad: «no quiero ser español». Esta frase es la esencia del nacionalismo vasco. Por eso tenéis esa obsesión y ese problema irresuelto con la identidad. Los del PNV, más prágmáticos, lo resolvisteis antes. Como muy bien dices, os distéis cuenta de que lo que se decide en Madrid os afecta. Los de Amaiur, más idealistas, se resisten y, aunque están a punto de pasar por el aro, sus conflictos identitarios siguen a flor de piel, situación que se manifiesta en su actitud incoherente en el Congreso.
Los catalanes, por el contrario, entraron a formar parte de España mediante un contrato (matrimonial), un tratado de coalición en el que «tanto monta, monta tanto…». Están en España porque quieren y, en todo caso, podrán replantearse la cuestión y salir de la coalición. Pero su identidad está clara y no tiene nada que ver con el nacionalismo. Es más: yo dudo que realmente exista el nacionalismo catalán. Y si existe, es muy minoritario. En Cataluña, lo que se da es el independentismo vs. el no-independentismo.
Pursuit,
perdona, pero da la impresión que temes electoralmente a Amaiur más que a un nublado.
Y visto el euskobarómetro no me extraña.
Josu erkoreka dice:
Todo ello, claro está, sin perjuicio de que durante todo este dilatado período de tiempo, haya habido catalanes y vascos que, pese a su origen, hayan consagrado su vida pública a hacer política estrictamente españolista.
Debería decir «política estrictamente española»,
Es semántica ya lo se, pero los -ismos se lo dejamos a ustedes que desean algo que no existe.
Josu erkoreka dice también :
Ese día se debatieron hasta siete iniciativas con reivindicaciones similares relacionadas con los derechos lingüísticos de los ciudadanos.
Debería decir «con los derechos de elección lingüístiica de los ciudadanos».
Estamos hablando de derechos para una población bilingüe, el ciudadano entiende perfectamente los dos idiomas y elige uno para expresarse.
No es lo mismo.
Josu, ¿Has considerado la posibilidad de que el criterio con el que actúan sea exclusivamente mediático? Date cuenta de que son muy muy muy propagandazales. Y aunque sean temas españoles, intervienen cuando el debate puede tener impacto mediático.
A ver, Josu. O sea que, si por abstenerse o «ausentarse» su voto no se cuenta, ¿Podría ocurrir que no impidiesen la aprobación de algo malo o impidiesen la aprobación de algo bueno? Si su voto es necesario para que se apruebe algo o para impedir que se apruebe algo y se abstienen o se «ausentan», serían de alguna manera responsables del resultado, ¿no?
¿Por qué la bandera de la CAV; es la bandera que se inventó Sabino Arana para representar al PNV y después a Vizcaya? ¿Por qué hay que rendir honores y pleitesías a este trapo de colores y compendio reaccionario de la España y del vasquismo más oscuro y esotérico? ¿Cómo hemos llegado a esta degeneración? Estarás contento Erkoreka; pero algún día alguien deberá revisar esta anomalía social y política. Sea el gobierno vasco, el español, la Unión Europea o su puta madre, pero alguien deberá enviar esta «bandera inglesa» al vertedero de la historia.
La ikurriña no representa a los vascos, sólo representa a un partido político de la ultraderecha. A mí todas las banderas me parecen unos trapos de colores, pero la ikurriña además parece del circo de los payasos ¡Qué cosa más fea! Deberían esconderla en los ayuntamientos por lo grotesco de sus colores… UN PATRIOTA, UN IDIOTA. ABAJO LAS FRONTERAS.
Dejad de dar votos al PP. Nacionalistas: cada nueva algarada vuestra, suponen miles de votos a Rajoy. Tenéis a Navarra y a Vitoria entregada al PP. Mientras sigáis así, el resto tendremos que pagar los platos rotos. Los del PP os tendrían que hacer un monumento.
Veo que hay muchos españolista disfrazado de progre razonable. Para intolerante, violento y excluyente, el nacionalismo español, que defiende su unidad con la ayuda del ejército. Para bandera ridícula, la española rojigualda que en Euskadi sólo puede imponerse (he dicho imponerse, sí) a base de sentencias condenatorias y amenazas de inhabilitación a los alcaldes y diputados forales. No me extraña. Es la misma bandera que en la guerra civil fue colocándose en las cumbres de las montañas vascas, conforme les abrían camino los bombardeos de la Legión Cóndor (nazis del III Reich) del Ejército del Duce y de los requetés.
Para nacionalistas, el PP, UPyD y gran parte del PSOE. Nacionalistas españoles, se entiende.
Pero lo mejor de todo es que se acuse al nacionalismo vasco del triunfo del PP. Tiene bemoles la cosa. En Euskadi, el PP es la cuarta fuerza política. Y en España ha ganado en prácticamente todas las autonomías. Si el PP gana es porque le han aupado los españolitos progresistas entre los que se sitúa shdbfgyjwmkdfk, cuyas ideas son tan confusas como su nombre.
Ramon,
Estás mal formado. Los territorios vascos no entraron a formar parte de Castilla desde que Castilla existe, ni desde luego por pactos matrimoniales de coronados. N sé si viste el otro dia al presidente de Francia en la ciudad vasca de . No te dice nada?
Navarra entró a formar parte mediante invasión militar, de un día para otro, a no ser que llames pacto al hecho de que el Católico (el del pacto matrimonial del Monta-Tanto) pactar consigo mismo que o los reyes de Navarra se van de Navarra o les lleva a la Mota.
Para «incorporar» Álava (Navarra) a Castilla el reino hispano tuvo que sitiar Vitoria durante meses.
Pero no se hable más. Euskadi es Castilla desde su inicio. Pero el nacionalismo historiográfico rojigualdo no existe.
——– ——— ———
No has entendido nada, Ramon.
Confundes marco-jurídico de Castilla en la Edad Media, Moderna y nacimiento de la Contemporánea con marco jurídico de España en 2012.
El nacionalismo vasco no discute estar en Castilla si sus territorios son en la práctica independientes, sino justamente lo contrario: discute estar en España sin ser independientes.
Hoy, dia 8 de Marzo de 2012, en el Diario de Navarra, conocido diario centenario anti-Euzkadiano, hay un reportaje sobre las batalla NAvas de Tolosa de 1212. Pues bien, en un mapa de la Peninsula Iberica en la que se representa los reinos y estados, lo que hoy corresponde la Bizkaia, Gipuzkoa y Alava están representados como: «territorios recientemente conquistados por Castilla a NAvarra»
Y luego el pys de Ramón da lecciones
Para precisar, EN SU MAPA «La peninsula den el siglo XIII», Diario de Navarra llama a los teritorios de la actual CAV: «Territotio navarro incorporado a Castilla». TERRITORIO NAVARRO. Y no hay españa, hay península
Alfonso Alonso, portavoz del PP en El País de hoy, 9 de marzo:
«¿Cómo ve la actuación de Amaiur en el Congreso?
Ellos vinieron aquí a tratar de trasladar una cara amable, pero muy pronto, como la cabra tira al monte les hemos visto con sus viejas reivindicacines y el señor Errekondo desgranó al presidente del Gobierno sus reivindicaciones, que eran la Alternativa Kas de ETA. Están otra vez en sus viejas reivindicaciones de defensa del proyecto totalitario de ETA»
Alfred, yo soy del PP. Exactamente igual que tú. Lo que pasa es que comparto lo que dice el PNV sobre la actitud de BILDU en relación con la gestión de la basura de Guipúzcoa. Y ya me gustaría que nuestro partido (el tuyo y el mío) dijera lo mismo.
Ya he leído el Euskobarómetro. Y lo que nos debería preocupar a tí y a mí, que somos del PP, es el hecho de que no despegamos electoralmente en Euskadi ni por suerte. Porque eso de que ganamos un escaño y un puñado de votos, no sirve para nada. Basagoiti ya perdió un escaño y un puñado de votos cuando forzó la retirada de María San Gil. Y que ahora, con mayoría absoluta en Madrid, no seamos capaces ni de recuperar lo que perdimos en el tránsito de María a Antonio, nos debería preocupar, y mucho.
¿UN PATRIOTA UN IDIOTA Y ABAJO LAS FRONTERAS?
CUANDO SE DISUELVA LA PATRIA COMÚN E INDIVISIBLE DE TODOS LOS ESPAÑOLES (HOY POR HOY PROTEGIDA POR LAS FUERZAS ARMADAS) Y DESAPAREZCAN LAS FRONTERAS DE LA ESPAÑA ETERNA, HABLAMOS. HASTA ENTONCES, TODOS LOS SERES HUMANOS TIENEN DERECHO A TENER SU PROPIA PATRIA.
Hablando de nacionalistas violentos, el presidente ddel Consejo Nacional de Transición libio, Mustafá Abdulyalil, advirtió a los dirigentes políticos y tribales que anunciaron la creación en Bengasi de una región semiautónoma, que usará la fuerza militar para garantizar la unidad del país. «Estamos preparados para el dialogo, sin marginar a nadie ni traicionar a nadie, pero Libia es y será una unidad indivisible aunque sea por la fuerza».
¿Les suena?
Lo mismo que la Constitución española, que encomienda a las fuerzas armadas la defensa de la integridad territorial de la España unida e indisoluble, patria común e indivisible de todos los españoles.
Ese sí que es nacionalismo excluyente, sectario y violento. El Español.
shdbfgyjwmkdfk.
la ikurriña existe porque así lo decidimos todos los españoles, es una bandera 100% constitucional.
dicho esto, estoy de acuerdo contigo que no es una bandera del PNV sino de todos.
Ramon
Discrepo de tu análisis. No es cierto que los territorios vascos formen parte de Castilla desde que Castilla existe. Bizkaia fue incorporada a una Castilla que ya existía. Alava protagonizó la conocida como «voluntaria entrega» a una Castilla preexistente. Y Gipuzkoa igual. En el caso de Bizkaia, la incorporación suponía el compromiso del rey de jurar los fueros cuando tomaba posesión del cargo. Era una incorporación formalmente condicionada al respeto de un determinado régimen público. El caso de Navarra es igual, aunque con la diferencia es que su conquista se produjo a traves de una guerra muy cruenta.
La diferencia entre los vascos y los catalanes procede de la guerra de sucesión. Los vascos estuvieron con los ganadores y los borbones, en agradecimiento, les mantuvieron los fueros. Los catalanes estuvieron con los perdedores y se les arrebataron sus leyes propias. Desde entonces, sus políticas son contrarias. Los vascos defienden lo que les queda, mientras los catalanes, que ya lo han perdido todo, buscan cambiar España para sentirse más cómodos dentro de ella.
El nacionalismo vasco surgió cuando la restauración decide cargarse los fueros. Si tengo que elegir entre ser vasco o ser español, prefiero ser vasco. Pero lo hizo después del nacionalismo catalán, que casi nunca ( tampoco ahora lo es ) fue independentista. No hay que confundir el independentismo de ERC (compatible, por cierto, con estrechas colaboraciones con la izquierda española, en la II República y en la era de ZP) con la tradición de Cambó, que sigue inspirando la actuación de CiU.
No has entendido nada, Dony. No hablo de esa entelequia llamada «derechos históricos». Sólo busco una explicación para la duda existencial-identitaria que angustia a los vascos… a diferencia de los catalanes. Mi hipótesis es que el nacionalismo vasco, étnico y romántico, es una cataplasma reciente y artificial, que no tiene nada que ver con los fueros ni con el reino de Navarra, mientras que la pertenencia de Cataluña a España ha sido siempre precaria y no necesita del pesado e inútil bagaje étnico.
Lo que quieras, Burduntzi, pero en Cataluña no hay un problema de identidad étnica. En el País Vasco, si.
«¿Por qué la bandera de la CAV; es la bandera que se inventó Sabino Arana para representar al PNV y después a Vizcaya?»
Shdbfgyjwmkdfk, estéticas aparte -siempre discutibles-, yo creo que la ikurriña es la bandera de la CAV por que el PSOE así lo “propició” en su día.
Los socialistas, al aceptar para todos los vascos la bandera peneuvista como suya, sumergidos en complejos e ingenuidades pensaron que los herederos del iluminado ultracatólico Sabino Arana quedarían satisfechos y abandonarían “la caverna”.
La historia ha demostrado con creces que su pretendida actitud falsamente “generosa”, lejos de reducir el quimérico “conflicto vasco”, más bien lo ha aumentado: Se podría decir que aquí tenemos todo un ejemplo de cómo a veces ciertos políticos engordan o inventan problemas donde no los hay.
Lo cierto es que un personaje de pésima salud física (y dudosa salud mental) ha conseguido con la ayuda de Dios (y no sólo de Dios) inventarse una bandera (y no sólo una bandera) que en la actualidad está amparada por la Constitución Española. Nos gusten sus colores o no, tenemos que aceptarla por aquello del «estado de derecho», además siempre está la opción de meterse en política y propiciar otras formas o colores. Personalmente me pareceria una mema manera de malgastar el escaso tiempo que disponemos en este mundo cruel.
Se dice por ahí que los norteamericanos son como son -entre otras cosas- por tener como nación una irrisoria historia –cronológicamente hablando- de poco más de 200 años. El invento de Policarpo Sabino Arana se apoya en andamios virtuales y reales bastante más bisoños y, desde luego, de lo que no cabe ninguna duda es que aún no se ha materializado.
Yo, con perdón, me atrevería a decir, en lo tocante a “las provincias francesas”, que es más factible que las ranas críen pelo… me temo que los gabachos -socialistas o no- no son tan “generosos” ni tan “ingenuos” (se admiten apuestas).
Saludos cordiales
Daniel, eres enorme. No tengo nada más qué decir.
El otro día el bueno de Sarkozy, tuvo que refugiarse en un bar porque las bestias nacionalistas canallas, quisieron atacarle en la turística Baiona (estos que ahora van de demócratas). Para que vean los gabachos con quién se están jugando los cuartos. Para mí todos los nacionalistas son una banda de malhechores, aunque gente como Alfred opinen lo contrario. Aunque claro, él vive en Barcelona tan ricamente; si viviera en la Euskadi profunda igual cambiaba de opinión. No te enfades alfred por mi comentario, escrito sin ningún ápice de acritud hacia ti.
.
[…] en, cuando menos, dos entradas que llevaban por título “Sopas sin sorber, no puede ser” y “Criterio inextricable“. En este último, cuyo título resulta muy elocuente, me confesaba incapaz de comprender el sentido […]