En el calendario chino, este año se desarrolla bajo el signo del dragón, una figura mítica que en la cultura oriental se identifica con la prosperidad y la buena suerte. Probablemente por ello, el Partido Comunista Chino (PCCh) ha dispuesto que el relevo de su cúpula dirigente -un trámite esencial para una formación política de esas características- se llevará a cabo a mediados de 2012. El presidente Hu Jintao y el primero ministro Wen Jiabao dejarán los puestos que ocupan, en las instituciones y en el partido, para dar paso a los que integrarán la cúpula dirigente que pilotará el país durante los próximos años. Todo parecía indicar que el relevo iba a producirse de modo pactado, sin sobresaltos y con los mejores augurios. En la línea de lo cabe esperar de un hecho que acontece bajo el signo del dragón. Pero contra todo pronóstico -no es habitual que la disputas internas del PCCh trasciendan a los medios de comunicación- la prensa se ha hecho eco estos días de un conflicto que ha terminado de modo fulminante con la carrera política de Bo Xilai; un dirigente del PCCh, hijo de uno de los Ocho inmortales del Partido, que aspiraba a formar parte del Comité Permanente del Politburó.
Bo Xilai tiene tras de sí una larga carrera política. Ha sido alcalde y ministro. Dicen que su ascendente trayectoria política ha estado adornada con una retórica intensamente neo-maoísta, que incluía abrumadoras referencias a la autocrítica comunista y a la revolución cultural. Curiosa paradoja en alguien que ha acompañado su biografía política con una masiva acumulación de dinero. Pero, súbitamente, Bo Xilai ha desaparecido del escenario. Y lo ha hecho justo en el momento en el que parcía abocado a formar parte del Politburó; un sanedrín de nueve miembros que lo controla todo en la vida política e institucional del país asiático. Se le acusa de corrupción, en una sociedad en la que ésta campa por sus respetos. Se le imputa, también, la participación en el asesinato de un ciudadano británico. Y es posible -no lo sé- que todo lo que se le atribuye tenga fundamento. Pero resulta difícil no percibir en lo sucedido la huella de una refriega palaciega urdida para purgar al personaje en un momento decisivo. Debe ser francamente difícil acceder a la reducida cúpula de poder de un país que tiene 1.300 millones de habitantes. Supongo que los codazos y zancadillas cruzadas serán terribles.
De todo esto y mucho más tratamos esta semana en un encuentro informal que celebramos en el palacio del Congreso con una representación de la Cámara de Comercio de la UE en China; una asociación de empresas europeas que trabajan en aquél país. Fue una entrevista muy interesante, que resultó posible merced al empeño que puso en ello el vitoriano Juan Ignacio Motiloa; un tipo extraordinario, inteligente y formado, gran profesional y mejor persona, que exhibe por el mundo el gusto de los vascos por el trabajo bien hecho.
Nos hablaron de las pecularidades de la economía y el del mercado chinos: su extraordinaria dimensión, el férreo control que el aparato público ejerce sobre todo lo que se mueve en su territorio y las singulares circunstancias que todo ello obliga a asumir a quien emprende allí una actividad económica. «Quien opta por jugar en China -nos dijeron- se enfrenta a un partido en el que todos, desde el equipo contrario hasta el árbitro, pasando por el público, la prensa y los responsables de seguridad, son chinos y juegan la misma estrategia. Pero el dilema es radical: o lo tomas o lo dejas».
La planificación de la economía china está en manos de gente muy preparada que es consciente del enorme potencial que encierra un país territorialmente inmenso, poblado con 1.300 millones de habitantes animados por unas incontenibles ganas de prosperar. China es la fábrica del mundo; la mayor central de compras del mundo. Pero es al mismo tiempo una gran potencia que está exigiendo a sus empresas que ganen en competitividad para ir aumentando su presencia en los mercados globales. De ahí su creciente aparición en todos los continentes, adquriendo materias primas, espacios comerciales, grandes empresas y deuda soberana.
En China no se respeta la propiedad intelectual. Sus empresas absorben como una esponja la tecnología creada en el exterior, incorporándola de inmediato a su inmensa máquina productiva. Tecnología que adquieren, tecnología que en dos o tres años acaban monopolizando, porque nadie puede competir con ellos a la hora de surtir el mercado global. La seguridad jurídica del inversor es prácticamente inexistente en China, aunque su estilo es muy distinto al que Cristina Fernández ha utilizado en Argentina para acordar la expropiación de YPF. Nunca expropian nada. Y menos aún con gestos estridentes y eco mediático. Todo es mucho más discreto y sutil. El que es excluido del sistema se da cuenta uno o dos años después de tomada la decisión, al descubrir que ya no vende, ni recibe llamadas y que el mercado cuenta con la presencia pujante de una o varias ofertas alternativas a su negocio. «Te hacen el vacío sin que te enteres», comentó irónico uno de nuestros interlocutores.
Navegar en un entorno así es enormemente complicado. Prescindir de él puede resultar fatal para una empresa competitiva de ciertas dimensiones. La oportunidad es tan grande, que siempre hay alguna dispuesta a entrar en el juego. Pero sumergirse en él entraña también riesgos y costes que es preciso ponderar, primero, y gestionar después. De entre las múltiples reflexiones que compartimos con los representantes de la Cámara de Comercio de la UE en China, quisiera destacar tres:
a) China evoluciona en todos los órdenes a una velocidad vertiginosa. Ya más de la mitad de la población reside en la ciudad. El mundo rural decae. Por otra parte, las condiciones laborales de los trabajadores están mejorando ostensiblemente. Los salarios empiezan a subir de modo perceptible y la mejora de la calidad de vida está alumbrando una clase media y media alta de creciente poder adquisitivo. Esto significa que ni los costes de producción son, hoy en día, tan bajos como lo eran hace tan sólo una década, ni puede despreciarse el gigante asiático como mercado idóneo para la demanda de productos europeos de marca.
b) Los chinos son muy buenos -literalmente insuperables- copiando los logros tecnológicos alcanzados por terceros, pero no son tan diestros innovando. Su sistema educativo, íntimamente asociado a la idea de la obediencia y la reproducción repetitiva de órdenes y consignas, no estimula la creatividad. Pasará, pues, algún tiempo antes de que China, la fábrica del mundo, pueda llegar a ser, también, la fuente mundial de generación de conocimiento y de transformación del conocimiento en valor. Esto significa que, al menos durante algunos años, la economía occidental podrá seguir disfrutando de la hegemonía en el campo de la I+D+i.
b) Los chinos operan con una concepción de la calidad muy diferente a la nuestra. Eso significa que los mercados de la UE deben exigir a sus productos, los mismos niveles de calidad que se exigen a los productos locales. Si las empresas europeas que se sumergen en el mercado chino tienen que adaptarse a su idiosincrasia, debería exigirse también que las compañías procedentes del país asiático se acomoden a los requerimientos del consumo europeo. Una política de bajos precios y de ínfima calidad, en ámbitos como, por ejemplo, el del juguete, podría acabar arrasando la producción local y abandonando el mercado en manos de un monopolio chino que, como todo monopolio, avanzaría hacia la oferta de productos mediocres, pero con precios elevados.
Todo esto y mucho más es lo que este año se mueve en China bajo el signo del dragón.
Estimado Josu,
Solamente hacerte una puntualización sobre el I+D+i, en las universidades españolas cada vez se ven más chinos (no hablo de los hijos de los que aquí se asientan). Me dicen que en Londres cada vez hay más chinos que vienen a trabajar una temporada en sus empresas en cargos medios y altos.
No sería yo tan tajante con nuestra supremacía investigadora o innovadora.
Para mi el rpoblema chino se basa en las tremendas desigualdades que cada día se hacen más patentes entre la ciudad y campo, y que pueden llebar al gigante asiatico a un periodo de gran inestabilidad social (solo mantenida por las fuerzas represoras de las que dispone el PCCh).
Besarkada bat
Carlos
Ese llebar con b ha sido un fallo tecleando…
China no nos vale de ejemplo para nada. Todos sabemos que la ETA era maoísta y el GRAPO también. Por lo tanto no sé de qué nos va a dar lecciones este país. Adónde no se respetan los mínimos derechos humanos. China es un peligro militar y económico y tienen un nacionalismo peligroso (y si no que se lo pregunten a los del Tibet). No me extrañaría que los nacionalistas vascos (los autodenominados de izquierdas) tuvieran un buen concepto de China; al fin y al cabo tienen muchos puntos en común: ambos son liberticidas y ambos son amigos de asesinar de un tiro en la nuca.
Cambiando de tema; he estado revisando unos libros muy bien documentos y cada vez aparecen más pruebas que demuestran la traición del Pacto de Santoña. Este tema lleva un tiempo que está como fuera de relevancia. Ahora que los nacionalistas están montando bronca con lo de Maya y demás. Pues este tema ya no interesa; aunque como quedáis como el culo, lo entiendo. Los historiadores auténticos (y también los de pacotilla) pasan mucho de vuestras patrañas, ya que están hartos de estar contestando vuestras mentiras constantemente y optan por pasar de lo que digáis. A mí me parece mal, ya que siempre habrá un rebaño de crédulos nacionalistas que se creerá vuestras invectivas sin cuento, dichas desde la Herriko Taberna o desde el Batzoki. Pero es lo que hay…
Yo sólo con leer la biografía y los escritos que dejaron Sabino Arana y Telesforo Monzón, tengo suficiente para ver la catadura moral vuestra. No me hace falta nada más. A mí no me va a engañar el Ortuzar con su propaganda y sus consignas cada vez que se acerca el Aberri Eguna.
Lo del castillo de Amaiur y demás, es toda una mentira con patas. Es simplemente un compendio de patrañas que a base de repetirlas las queréis fosilizar. No pasa nada amigos, los papeles hablan y si la arqueología no deja muchas pruebas de vuestras aberraciones históricas; si existen otras fuentes que demuestran que estáis tergiversando todo, para que sintonice con vuestra invectiva. Sabemos lo que ocurrió en Amaiur y también sabemos lo que escribió Sabino Arana. Ahora a seguir mintiendo y no paréis.
Escuchar las cosas que decís sólo nos da risa y nos demuestra hasta donde llega vuestro fanatismo y las ganas de inventaros lo que no sucedió. Jeltzales: os están seduciendo los historiadores de la Herriko Taberna y esto acabará como el rosario de la aurora o como mínimo será otro escándalo tipo: Iruña-Veleia, con Eliseo Gil haciendo el ridículo
No por ser de hace mucho tiempo; no puede dejar de darnos risas y carcajadas ¡Yo me parto! ¿Quereís flipar? Esta peña está drogada, fumada o algo peor!!!
http://www.elconfidencial.com/espana/2011/10/29/malestar-en-miembros-del-opus-un-numerario-ira-de-numero-dos-en-la-lista-de-amaiur-86795/
Vaya cuadrilla de impresentables: El Opus Dei y los batasunos, unidos para liberar Euskadi. Ama Birjina!
[…] Josu Erkoreka bere blogean: Bajo el signo del dragón […]
Estimado Josu. Bo Xilai, probablemente es la punta del iceberg y pronto irán saliendo mas asuntos turbios. Es verdad que el Politburó lo controla todo y como en gran hermano, alguién debe controlarlo. Será el pupet master que nos controla a todos? o es el propio club de los 25?. No lo sabrémos y tratar de averiguarlo es perder el tiempo. Por eso, lo llamativo es que siendo el año del Dragón pasen estas cosas y en China nada pasa por casualidad. El creciente poder de la China, no se corresponde con la situación de su pueblo y con los metodos y que emplean para expandir su hegemonia. Según recientes datos, muchos de los edificios que construyen, Shanghai p.e., estan vacios y la prisa por copiar les hace cometer graves equivocaciones, que rompen con la imagen de perfección que quieren dar. No todo es progreso y el made in china va pareciendose mas a un desarrollismo sin control, que a un progresivo metodo de crecimiento.
Ya veremos, pero el Dragón es un ser mitológico y no siempre trae suerte. Muchas veces actua en un ajuste de los desequilibrios vitales y obliga a replantearse las metas….y por tanto la trayectoria.
SALUDOS
Tenemos en buenas manos la representación de los vascos en la capital del reino con el tridente Olabarria-Erkoreka-AZpiazu
Gracias Lehendakari el tema China me encanta …
Me parece una buena medida exigirles los mismos estándares de calidad… es lo coherente! La pregunta es ¿por Qué se está tardando tanto en hacerlo?… Supongo que algún acuerdo secretillo tendrán China y Europa por ahí.
En cuanto a las empresas… entiendo que al. principio pecaran de novatas…. pero ahora… supongo que sus contraprestaciones obtener drán … de otra manera les resultaría más rentable exportar los productos que les quieren vender sin tener que enseñar las tropas de cómodo lo. Hacen…. Quiz
Quizás algunas solo buscan estar presentes cuando se produzca un cambio social importante. O simplemente producir allí para vender en Europa… pero bueno si se quedan sabiendo lo que saben… por algo Será. Quizás se arrepientan dentro de unos años…
Siendo vascos como sois y en Beasain tenéis CAF que construye trenes y otros elementos similares. Os quiero decir que si en España hay empresas capaces de construir una línea férrea a cinco mil metros sobre el nivel del mar.
Con la tecnología en los convoyes adecuadas para circular con confort, con aire etc..
En China los hay.
Copiar cuando han puesto satélites superiores a los españoles en órbita tripulados…etc.
No creo que podamos decir que copian todo.
A propósito los coeficientes de inteligencia medios de las naciones conviene recordarlos.
China tiene uno de los coeficientes más altos.
(He entrado en esta página buscando dibujos de dragones)