Gaur arratsaldean, mitina daukagu Bermeoko frontoian. Hori dela eta Iñaki Anasagastik argazki bat atera deust bere agortuezineko artxibo marduletik. Orain 33 urte, leku berean, frontoian, EAJ-k ospatu zuen mitin bateko irudia ikusten da bertan. Konstituzioaren erreferendumaren aurreko kanpainan ateratako argazkia da itxura guztien arabera. Horman zintzilik ikusten diren paperek «abstentzioa» eskatzen baitie botoemaileei. Beraz, 1978ko abenduan, ateratako argazkia da, gogoratzen ez duenarentzat. Esan bezala, laster beteko dira 33 urte.
Ikusten denez, Anton Ormaza dago tribunatik berbetan. Eta mahaian, jesarrita, sasoiko beste jelkide batzuk. Gillermo Elgezabal –Ginbo- ikusten da eskuman. Bere ondoan, Iñigo Agirre diputatua. Eta erdi-erdian, Amaya Gaztelu.
Sasoi hartan, sinbologia argia erabili ohi zen, ekitaldi politikoen bukaeran kanta abertzaleak –Eusko gudariak gara, Aupa gizona jeiki mutil, eta horrelakoak- abesten zirenean. Ezkerreko jendeak ukabila jasotzen zuen eta ikurriñaren ondoan, bandera gorria erakustea zuen gustoko. Gorria baino, sobietarra: mailu, zerra eta guztiarekin. Berlingo arresia erori gabe zegoen oraindik eta, gezurra dirudien arren, asko ziren, alde honetan, beste aldekoen bizimodu goxoaz, eredukorraz, eta justiziaz beteaz hitz egiten zigutenak. Jelkideek, berriz, ikurriña eramaten zuten -ikurriña bakarrik; inola ere ez bandera gorririk- eta beso jasotzen zutenean, ez zen ukabila erakusteko, erdiko eta zuzeneko atzekin irabazpenaren V-a egiteko baino. «Irabaziko dugu» adierazi nahi zuen keinu horrek. «La V de la victoria» deitzen genion.
Asko aldatu dira gauzak harrez gero. Argazkian agertzen diren batzuk -Anton Ormaza eta Ginbo, esate baterako- joan zitzaizkigun betiko. Baina ideia eta baloreak ez dira hain erraz aldatzen. Eta hortxe dirau Amaya Gaztelu, 33 urte geroago, betiko pentsamolde eta printzipioekin. Lehen bezala, orain ere Euskadi askea gizon eta emakume askeez bakar-bakarrik osatu daitekeela aldarrikatzen du. Eta lehen bezala, gaur egunean, badaki jakin, balore horiek nekez defendatu daitezkeela ukabilaren sinboloak berarekin dakarrenarekin.
Kontua da, argazkiko mitin hartan V-a modurik sutsuenean erakusten ibili zen bat baino gehiago, ukabildunekin nahastuta -ala euren menpean?- agertzen zaigula gaur egunean.
Sr. Erkoreka, los hemos cogido a ustedes «los políticos» con el paso cambiado ¡Otra vez! Hartos estamos todos los ciudadanos ¡La vamos a montar gorda! Hasta en el Gorbea y la Sabin Etxea nos van a escuchar. Nos habéis empujado al paro y a no creer en los partidos políticos a los jóvenes y eso tendrá una respuesta pacífica y democrática, pero también firme y combativa… PNV, PSOE, PP no nos representáis.
15M ¡Democracia Real Ya!
Esto sólo acaba de empezar, queremos la democracia que nos estáis socavando.
Hoy 15 de Mayo del 2011, empieza la lucha por la democracia en España ¡Viva la democracia y la libertad!
PD
Ahora siga aquí, en su Blog, con su amigo Donatien, debatiendo sobre lo terrenal y lo divino, mientras a solo 100 metros de su despacho está formándose un Tsunami democrático ¿Es posible estar tan alejado de la sociedad, Sr. Erkoreka?
¿Porqué la crisis tienen que pagarla los más débiles?
¿Porqué se recortan los gastos sociales, cuando más se necesitan?
¿Porqué no se hace nada para crear trabajo digno?
¿Porque solo os acordáis de nosotros cada 4 años?
¿Porqué por pedir democracia y lucha real contra la corrupción política de manera pacífica me llaman antisistema?
¿De verdad no os da vergüenza tener un 40% de paro entre los jóvenes?
La única solución a estas preguntas es: DEMOCRACIA REAL YA
El principal acto de campaña de hoy ha sido la presentación del recurso a favor de SORTU ante el tribunal constitucional. Un aviso claro de la izquierda abertzale a los tontorrones de EA y de Alternativa. Vamos a lo nuestro. Lo de Bildu no es mas que un entretenimiento pasajero. En cuanto tengamos nuestra propia marca, prescindiremos de vosotros y nos quedaremos con todos lis locales que EA arrebato al PNV durante la escisión.
Hola, Josu.
Perdona que te interrumpa durante la campaña. Lo hago porque me interesaría (y creo que no sólo a mí) saber tu opinión sobre el llamado «Movimiento 15M». Aunque no comparto tu posición política (vale: no hace falta que lo jure), siempre te he considerado un mirlo blanco: un político honrado. Por eso me gustaría saber lo que piensas sobre este fenómeno que es político, pero no lo es.
Gracias y saludos
Mogelen fabula jarraituz, Astoak bi era dauka mugitzeko azenarioa edo makilla, hauteskundeetan jausiko jakon makilakadagaz lepoan ikusiaz, bestearen azanarioa gurago izan dabe. Dana dan astoaren azken pausuak.
Bestalde Anton Ormazari buruz ze esan, euskalduna, euskotarra, bizkaitar eta bermiotar, apal, zintzo eta leiala.
Gure Ama-Lur txiki-aundi egiten daben gizonei. Eskerrik asko.
Ondo dinozu Josu. Nik ez dakit zeri begira dabilzen EAko horreek, euren oraingo paginen ukubille altzaten dabienien.
Ramón:
No tengo un diagnóstico claro y me temo que, hoy por hoy, nadie lo tiene. He visto en las concentraciones a jóvenes de muy diferente estética, a jubilados, a señoras con el carro de la compra, a abuelas con la silleta de los nietos… en fin, gente muy diversa que dudo que tengan un planteamiento homogéneo o una reivindicación unitaria, más allá de la expresión airada de un malestar muy serio por la situación en la que nos encontramos.
Sobre las reivindicaciones más notorias: Democracia real ya, y Fuera la Corrupción, nada tengo que objetar, evidentemente. Con lo segundo estoy absolutamente de acuerdo y lo primero requeriría previo -creo yo- sobre lo que unos y otros consideran que ha de darse en un régimen político para que pueda considerarse una democracia real. Todo es mejorable, por supuesto, y el sistema político español lo es, sin duda alguna. Pero a mis cincuenta años, las reivindicaciones absolutizantes que reclaman lo «real», lo «auténtico» o lo «completo», no me estimulan demasiado.
Sobre lo que se dice apropósito de la «Clase Política», no puedo ser más escéptico. No creo en la existencia de un colectivo definido en torno a unos rasgos comunes que pueda ser incardinado bajo el epígrafe de «Clase política». Yo, un diputado que no gestiona un solo euro y vive del sueldo que emana del escaño, tengo poco o nada que ver con la presidenta de Madrid, que administra un presupuesto público multimillonario o con un senador del PP que tiene abierto un despacho de influencias en Madrid que le produce rentas que multiplica por cinco, seis o más el sueldo mensual de la cámara alta.
Hoy por hoy, lo veo todo muy disperso e inarticulado. La indignación popular, la comprendo. Pero las generalizaciones siempre acaban resultando injustas e inexactas. Es fácil echar la culpa a los políticos, en un país en el que son muchas las cosas que se han hecho mal -y no sólo por parte de los políticos, por cierto- pero hay que estar ojo avizor para adivinar lo que en el fondo moviliza al colectivo. Podría estar dándose una especie de «quítate tú para que me ponga yo» o una suerte de operación lampedusiana del estilo de cambiarlo todo para que en el fondo no cambie nada.
En cualquier caso, seguiré con interés el fenómeno.
¡Muchas gracias, Josu!
Yo estoy viendo las manifestaciones con mucha esperanza. Creo que su mayor virtud es, precisamente, que no se han organizado alrededor de una propuesta clara o para derrocar a un enemigo concreto, lo cual sería sospechoso y aburrido. Por el contrario, lo único que que las ha provocado, las une y las define es la insatisfacción.
Entiendo que a tí, político, abogado y catedrático que eres, te repela la idea de una queja un tanto hueca, que no está claro de qué se queja y, menos aún, propone una alternativa. Pero, así, recuerda, es como empiezan las grandes revoluciones.
El capitalismo liberal y la democracia occidental ya han dado de si todo lo que podían dar. Cumplieron su tarea en una época pero ahora están tan ajados y corrompidos que son un problema, más que una solución. Y los sistemas sociales y políticos no se pueden lavar y planchar. Son de usar y tirar. Hay que ir pensando en algo nuevo.
No creo que las protestas de las plazas vayan a dar una solución o una alternativa. Me decepcionarían si lo hicieran. Además, muchos tratarán de utilizarlas o desvirtuarlas (algunos ya están en ello) y, esta vez, terminarán, probablemente, disolviéndose sin mayores consecuencias. Pero son el principio de algo. Es posible que el siguiente paso, esta vez sí, sea una reivindicación concreta. «¡Democracia directa ya!» es mi propuesta.
Saludos y suerte mañana con la quiniela.
Por si sirve de algo comentaré que a mí en febrero me llego un. mail invitándome a. concentrarme el dìa 15…. la persona que me lo envió es fotógrafo…. así que ni espontáneo ni con un partido de por medio…. salvo el anarquista…..
Lamento no poder compartir tu esperanza, Ramón. Coincido contigo en que, hasta ahora, el heterogéneo grupo de personas que se congregan en las plazas bajo el emblema del l15-M -entre los que, por cierto, hoy mismo he sabido que, para enriquecer el crisol, estuvo la semana pasada el presidente de Coca Cola España; cosa que después dejó registrado en su twitter- sólo tiene un denominador común: la insatisfacción. Una insatisfacción cuyas causas achacan genéricamente a la «clase política». Pero estoy absolutamente seguro de que tampoco la «clase política» -si es que realmente existe; ya sabes lo que yo opino al respecto- está satisfecha con la situación.
Sobre lo que reclaman, nada se puede decir con certeza. Seguro que no se equivoca quien piensa que se dan cita los que piden cosas tan contradictorias como poder seguir trabajando para vivir y poder seguir viviendo sin trabajar.
Tengo mis dudas de que las grandes revoluciones hayan comenzado siempre, tal y como señalas, con una plataforma reivindicativa imprecisa y ambgua. Pienso que en todas ellas ha habido un grupo nuclear que tenía perfectamente claro lo que quería y supo utilizar a las masas para ponerlas a su servicio. En cualquier caso, no creo necesario recordar aquí las frases célebres que los más escépticos han ido formulando en torno a las revoluciones. Decía Louis Latzarous que «todas las revoluciones son comenzadas por unos idealistas y acabadas por un tirano» Benavente escribió que «lo de cambiar los nombres sin cambiar las cosas es lo primero con lo que se engaña al pueblo en todas las revoluciones.
No seré yo quien dé replica a tu afirmación de que el capitalismo liberal y la democracia occidental, tal y como los conocemos en los últimos tiempos, adolecen de grandes defectos. Efectivamente es así. Pero te recuerdo que no resulta difícil -y espero que no interpretes mi respuesta como una acusación- encontrar frases parecidas en los publicistas que dieron cobertura al levantamiento del general Franco y sus primeros años de Gobierno. Podría citarte unos cuantos ejemplos. El franquismo era, para ellos, una revolución nacional regeneradora, que ponía a España a salvo de la podredumbre que aquejaba a la democracia liberal en toda Europa.
Tampoco militaré en contra de tu exigencia de «!democracia directa ya!». Pero todavía recuerdo todo lo que la intelligentsia de la corrección política hispana teorizó y argumentó en contra de la democracia directa cuando un Lehendakari del PNV sugirió la posibilidad de plantear una consulta popular.
Un abrazo
¡Qué negativo te veo, Josu! ¡Ánimo, hombre! La historia, de vez en cuando, da un bandazo en la buena dirección. En cualquier caso, el tiempo nos dirá en qué acaba todo esto.
No te lo voy a negar, Ramón. Sería absurdo hacerlo. Pero hoy y aquí, haría falta un consenso previo sobre lo que consideramos que es «la buena dirección». Y me temo que ese consenso no existe. La «historia» ya no se mueve sin que la empujen los que la protagonizan, que no son las elites sino los ciudadanos. Y como te decía ayer, no veo posible sintetizar los deseos, inicialmente heterogéneos, de todos los que se concentran en las plazas.
Ayer por la tarde, en Bilbao, los que participan en las protestas, difundieron unos folletos en los pedían más fiesta y menos policía. De acuerdo. El jardín del edén. Y más amor. Y felicitad para todos. ¿Quién se puede oponer a eso? Pero no se si, en los tiempos que corren, ese horizonte está fijado en la «buena dirección». Desde luego, dudo seriamente que lo esté para quienes desean un puesto de trabajo y un adecuado desarrollo profesional en este mundo globalizado y competitivo.
En cualquier caso y, como bien dices, veremos en qué acaba todo. Personalmente procuraré seguir prestando al fenómeno toda la atención que merece.
De fenómeno nada Sr. Erkoreka, que estamos hartos de los tejemanejes de la clase política. A ver si se entera.
El fenómeno eres tú, Alakrana Alakranado. Tú sí que eres un fenómeno. A ver si te enteras y haces que se enteren tus amigos los patriotas de la piel de toro.
Lo que se ha visto en Euskadi es que los ciudadanos vascos estamos hartos de los tejemanejes de los partidos españoles (El PSOE y el PP), que representando tan sólo 1/3 de la población se han hecho con las riendas del Gobierno con trampas en la aplicación a conveniencia de la Ley de Partidos. Toma nota, Alakrana Alakranado, y reflexiona sobre el tema.
Josu, ¡Podemos! Todavía hay esperanza.