En plena ebullición de la polémica suscitada por los guiñoles franceses de canal plus que hacen mofa y escarnio del deporte español -resulta francamente interesante el espectáculo que ofrecen los sedicentes no-nacionalistas, replicando airadamente al gabacho en defensa de la dignidad nacional ofendida- estos días he tenido ocasión de leer un interesantísimo libro de reciente publicación, en el que se recoge la tesis doctoral que el conocido médico deportivo Xabier Leibar defendió con éxito, el año pasado, en la Universidad Complutense de Madrid, sobre “La participación de los deportistas de la Comunidad Autónoma Vasca en los Juegos Olímpicos de Verano de la Era Moderna”.
Me consta que las investigaciones de Xabier se han proyectado, también, sobre la participación olímpica de los vascos de Nafarroa y de los naturales y residentes en el Estado francés. La tesis, sin embargo -así suelen ser las exigencias formales de la Academia- se circunscribe a los de la Comunidad Autónoma Vasca (CAV). Con todo, confío en que, una vez superados los corsés académicos, algún día pueda preparar una publicación en la que se recoja la trayectoria olímpica de todos los vascos. Se lo agradeceremos los aficionados a la historia y al deporte.
El trabajo al que me refiero viene a cubrir una laguna de nuestros estudios deportivos, en la medida en que, hasta su publicación, carecíamos de una visión fiable y de conjunto sobre el acervo olímpico vasco. Su lectura, por ello, resulta apasionante. Está plagada de informaciones curiosas y datos novedosos. Mediante un análisis ordenado y sistemático de la participación vasca en los juegos olímpicos de verano de la era moderna -que pueden ser considerados como la máxima expresión del deporte de élite- el autor plantea una sugerente aproximación histórica y presente al deporte de alto rendimiento en Euskadi. La obra incluye, desde un exhaustivo recuento estadístico, que clasifica a los deportistas por épocas, territorios, género y modalidades deportivas, hasta los detalles precisos y llamativos que ilustran gráficamente las condiciones en las que se produjo la participación de algunos de ellos en las olimpiadas.
Permítaseme reproducir en este humilde comentario algunas de las cifras más relevantes que el estudio da a conocer.
Han sido 271 los deportistas naturales o residentes en los territorios actualmente integrados en la CAV que han tomado parte en los 29 juegos olímpicos celebrados entre 1896 y 2008. Pues bien, estos 271 deportistas han registrado un total de 356 participaciones en la competición olímpica -algunos, como es obvio, tomaron parte en dos o más ocasiones- constituyendo un 11,33% de los miembros del equipo del COE. Esta última cifra tiene su importancia porque, durante ese mismo período, los territorios vascongados representaron, como media, el 5% de la población total del Estado español. Así pues, la participación olímpica de los territorios vascos, se ha situado notablemente por encima de su peso demográfico.
Esta participación dio comienzo en París-1900, con un solo deportista y, hasta la fecha, se ha hecho efectiva, por última vez en Beijing-2008, con 24. Entre medio, la participación más numerosa tuvo lugar en Barcelona-1992, con 42 deportistas.
Las mujeres intervinieron por primera vez en los juegos de 1948 y han registrado un total de 72 participaciones durante el conjunto del período estudiado.
Por territorios, el más olímpico es el de Gipuzkoa que, tanto en la etapa preautonómica como en la autonómica, envió a los juegos un número de deportistas que superaba, en porcentaje, a su peso demográfico en el conjunto vascongado. Prácticamente la mitad de los deportistas vascos que han participado en los juegos de la mano del COE, han sido gipuzkoanos.
Y por deportes, hay cuatro modalidades que acaparan prácticamente la mitad de la participación: fútbol, atletismo, hockey y remo. Tras ellos se registran, en orden descendente, el ciclismo, el balonmano, la vela y el piragüismo. El resto de los deportes, tienen un peso notablemente inferior.
En fin, cabe señalar que durante los 112 años que abarca el estudio, el colectivo estudiado ha obtenido 47 medallas y 87 diplomas. El mejor resultado fue el de Atlanta-1996, donde 7 deportistas vascos del COE resultaron medallistas y 16 diplomados.
De cara al futuro, el panorama no parece demasiado halagüeño. Aunque la cultura deportiva se ha incrementado notablemente en el País Vasco, la evolución demográfica de los últimos años no permite abrigar expectativas demasiado ambiciosas.
Estos y otros muchos datos, ordenados y tratados científicamente, conforman el interesante contenido del libro al que se refiere este comentario. Nos hallamos, sin duda, ante una obra novedosa e imprescindible en las bibliotecas de Euskadi, que arroja luz clara sobre un aspecto de la vida social vasca que hasta ahora sólo se alimentaba de intuiciones, recuerdos y suposiciones.
Zorionak Xabier. Ikerketa ederra burutu duzu. Sakona, serioa eta zehatza. Euskal herrian, gure izaera, jatorria eta errealitatea hobeto ezagutzeko behar ditugun horietakoa. Ea, esan bezala, hurrengoan, euskaldun guzti-guztien bilakaera eta joan-etorri olinpikoaz liburu berria osatzeko parada aurkitzen duzun.
Nagyon érdekes!
Josu,
Puedes decirme qué es eso de la «CAV, Comunidad Autónoma Vasca»?
En qué texto jurídico se crea esa figura de derecho público?
Gracias.
Josu,
Vas a rezar todas la noches por que Garona no reviente durante los próximos 5 annos?
Hasta dónde llega la avaricia? 71 vuaductos (en letra: setenta y uno) para el AVE radial madrileño, cinco años más de central atómica (et à suivre…), …
Ya sabes lo que ha pasado con la avaricia aplicada al sector financiero-inmobiliario. Pero, podríamos permitirnos otras penitencias?
«vascos de Nafarroa» será navarros de Navarra. No se puede ser: catalanes de Canarias ni gallegos de Andalucia. A no ser que seas Sabino Arana y que te creas que el viejo reyno está en Vizcaya. No escriba tonterías tan enormes, que gana un sueldo muy alto a costa del bolsillo de los españoles para insultar a los navarros. Estamos en crisis, y los de siempre con las tontunas de siempre. Vaya manera de ganarse el pan tienen algunos.
A los navarros no les hace falta que los manden desde Euskadi. Ellos solitos saben lo que tienen que hacer y harán lo que les dé la gana ¿Para qué van a entregar su soberanía al PNV o a la ETA? Cada uno en su casa y Dios en la de todos. Fraile Erkoreka.
Donatien, a estas alturas deberías saber ya que la Comunidad Autónoma Vasca es esa entidad jurídico publica creada por el Estatuto de Gernika, que la izquierda radical vasca denostó y boicoteó durante los años en los que nos aseguraba que en cuatro días ellos conseguirían la independencia a base de bombas, pistolas, secuestros e impuesto revolucionario. Esa entidad que, ahora, visto el fracaso de la estrategia violenta, definitivamente derrotada gracias a la policía y al rechazo mayoritario del pueblo trabajador vasco, la izquierda revolucionaria vasca, no solo acepta gustosamente, sino que aspira a gobernar. La Comunidad Autónoma Vasca es la prueba de que la estrategia realista del PNV era la correcta (los revolucionarios vienen a ella con las orejas gachas) y que la alternativa revolucionaria (la de las pistolas, el secuestro y el boicot a las instituciones) era una mera ensoñación sin fundamento, que solo ha provocado sangre y dolor y no ha conseguido nada. Espero que te haya quedado claro y que a partir de aquí nos hables del deporte vasco. Nos podrías hablar por ejemplo de las gestas de Gallastegi en la selección de rugby de España y de la gran aportación de Errekondo, egregio parlamentario de Amaiur, a los triunfos deportivos del balonmano nacional español.
¿En qué editorial se ha publicado? Parece un libro interesante.
Ergo… Socialismo = Pistolerismo
El jefe superior de la policía de Valencia del Cid dice ahora que el apaleamiento y ataque criminal de sus tropas contra el «enemigo», la sociedad civil estudiantil, es proporcionado «desde su punto de vista».
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/02/20/valencia/1329761802.html
Ahora bien, si para otros los ataques que su cuerpo ha recibido por parte de ETA han sido proporcionados, entonces se suben por las pardes y dicen que no podemos pensar así, que somos terroristas por pensar que la bomba-lapa puesta a su colega del cuerpo especial de contravigilancia en Arrigorriaga fue estrictamente proporcional y proporcionada.
Hasta cuándo la ley del embudo?
València, Calatrava y sus millones, Ecclestone y los suyos, la Copa América y los de a saber cuántos, Alacant y la mafia de media Europa residienido, el 30% de paro y Cotino y sus asesinos.
Josu, por la presente entrada en el blog renuncias de manera permanente e irrevocable a tu derecho a mofarte de los españoles jaleando a La Roja.
Se me olvidaban los 43 muertos del metro de la Generalitat Valenciana.
No había dinero para la financiación suficiente que garantizase la seguridad de los viajeros, pero sí para dárselo por decenas a Calatrava para hacer esas faraonadas, o a Ecclestone.
Pero ni Camps ni Barberá ni Cotino tuvieron nada que ver con esos 43 homicidios. Salieron de rositas.
Pues yo soy navarro y vasco. Navarro como el que más y vasco como el que más. Y una de mis lenguas, además de la española, es la lingua navarrorum, es decir la lengua vasca. El euskera. Sin embargo -mira como son las cosas- no me siento español.
Decir que los navarros no son vascos es como decir que los de Laburdi o Zuberoa no son vascos porque son franceses. O como decir que no se puede decir vasco de Gipuzkoa sino gipuzkoano de Gipuzkoa. Una bobada, vamos.
Halderdiquide,
Puedes decirme qué es eso del «Estatuto de Gernika»?
Qué texto jurídico se llama así? Te refieres al popularmente conocido como «Estatuto de la Moncloa» en realidad, acaso?
En todo caso creo que te pierdes tú mismo y te chocas con Erkoreka, que también anda despistado.
No pasa nada, no sois los únicos. El propio Gara, prestigioso diario de tirada nacional, también usa esa expresión absurda y antivasca, lo de «CAV».
No estaría de más que os enterarais de una vez que hay dos CAV, luego el uso del artículo determinado no procede conceptualmente, y ni tan siquiera i formalmente.
No conozco a ningún navarro que cuando sale fuera de Navarra se presente como vasco. Siempre dirá: soy navarro. Si tú no sabes dónde está Navarra, es tú problema, no el nuestro. A Navarra no la hacen falta los vascos para nada.
El auto-odio de algunos navarros llega al paroxismo. Cuando son los mas vascos de todos, cuando sus antepasados eran los VASCONES, incluso gran parte de la CAV era considerada en la alta edad media como Navarra occidental. Como bien escribio en su «Navarra maritima» el jurista e historiador Tomas Urzainqui.
Dicho esto, y refiriendome a su articulo sr. Ercoreka, me recorre una sensacion de amargura cuando le leo y dice que hemos llegado a ser el 11`33% de la representacion española en los JJ.OO., cuando suponemos el 6% de la poblacion del reyno de España. Si , es motivo de orgullo, pero tambien de amargura y frustracion porque esos deportistas no representaran a la tierra vasca, no ejerceran de vascos, representaran a un estado para su mayor gloria y que nos niega nuestra existencia a nivel internacional. A dia de hoy o somos estado o desapareceremos poco a poco disolviendonos dentro de eso que se llama globalizacion, proceso imparable donde lo haya. Como a pasado con otros pueblos del mundo , mientras que otros han sobrevivido , como todos los que se han liberado los ultimos 25 años en europa, ¡que envidia!, o como pronto lo puede conseguir Escocia (ojala).
Hoy dia solo el ser estado nos garantiza que existamos en el concierto internacional, pero para eso hay que llegar a un democratico enfrentamiento con el estado como dice nuestro mejor valor politico, Juan Jose Ibarretxe.
Pero para llegar antes a eso tiene que haber una labor pedagogica por parte del partido entre su afiliacion cosa que no parece verse.
Por tanto , modestamente pienso que mientras no se llegue a este estado de cosas, estaremos hablando de castillos y flores, perdiendonos en el oscuro y negro tunel de la politica española con sus negras consecuencias economicas para nuestro pais.
Testimonio de una andereño de Saint Palais, en la Sexta Merindad de Navarra (lo que la bizkaina Yolanda Barcina, presidenta de la Comunidad Foral de Nafarroa, denominaría Francia):
“Yo soy de Saint Palais, de la sexta Merindad de Navarra. Allí todos saben que somos vascos. Hay algunos que no saben que somos navarros. Lo vasco prima sobre lo navarro. Lo navarro se ha desdibujado. En Tudela, por el contrario, todos saben que somos navarros. Hay gente que no sabe todavía que somos vascos. Ha pasado exactamente lo contrario que en Saint Palais. En Saint Palais se ha desdibujado lo navarro y ha triunfado lo vasco. En Tudela se ha desdibujad lo vasco y ha triunfado lo navarro. La verdad es que somos vascos y navarros”.
Nafarroa Arragoa,
Pues si esa andereño de Donapaleu supiera que en la España profunda -de la que forma parte la Barcina- aseguran que Tudela no es vasca «porque es navarra y lo navarro es navarro, no es vasco» y que admiten que Donapaleu es vasca «porque es el País Vasco Francés, no Navarra», entonces le daría el hipo.
Porque una cosa es desdibujar, y otra cosa es ser un pollino ignaro.
Nafarroa Arragoa,
No solo Yolanda Barcina la denomina como Francia, millones de personas también la denominan así, empezando por los franceses.
Eso de la merindad es una chorrada muy poco conocida.
¡Deberías ser comprensivo!
Joseba Gerenabarrena se pega unos disgustos y unas amarguras dignas de mejor causa.
Será que se aburre….
Alfredo apela a la fuerza estadística de los millones de moscas que se solazan en la mierda.
Donatien, no hay dos CAV. Hay una sola CAV. La otra es CFN. Hay que leer un poco, aunque se esté haciendo patria a miles de kilometros.
El Estatuto de La Moncloa es, en realidad, el que iba a preparar la Mesa de Alsasua de la que nada más se supo. Ahora, los cachorrillos de la izquierda abertzale participan en las elecciones españolas y se sientan al lado de Rosa Díez reconociendo su españolidad. Lo que hay que ver por tener ojos.
Dejad a Navarra en paz.
Ignaro Buruaga,
Hay una «Comunidad Autónoma del País Vasco» y hay una «Comunidad Foral de Navarra».
Las dos son comunidades autónomas de acuerdo con la CE 1978, texto que las origina, aunque una no lleve el nombre integral del sintagma «comunidad autónoma».
Del mismo modo hay dos comunidades autónomas que son forales, aunque una de las dos, la que los es por partida triple, no lleve en su nombre dicha cualidad.
Como veo que tienes que volver a Barrio Sésamo, Buruaga, te lo voy a aclarar en clave de Barrio Sesamo, a ti y de paso al titular de este grato Blog:
HAY DOS COMUNIDADES AUTÓNOMAS VASCAS Y HAY DOS COMUNIDADES AUTÓNOMAS FORALES: la Comunidad Autónoma Foral de Navarra y la Comunidad Autónoma del País Vasco o de Euskadi.
Unu saludo,
Donatien
¿Cómo voy a dejar en paz a Navarra si soy navarro por los cuatro costados? Sois vosotros los españoles los que tenéis que apartar vuestras sucias manos de Euskal Herria.
Estulto Donato:
La ignorancia es atrevida. Y si el ignorante milita en la izquierda abertzale, su ignorancia se hace, además, osada. La CAV y la CFN no son iguales. La primera nace de la disposición transitoria 2ª de la Constitución, en relación con su artículo 148. La segunda nace de la disposición adicional primera. Por eso la primera no se hace llamar foral y la segunda sí. Que la primera sea, también, titular de derechos históricos, no equivale a que emane de la disposición adicional primera.
Hasta luego Epi. ¿O eres Blas?
alfred, no entiendo tu comentario. Yo no he hablado de Francia. Lo que sí que sé es que Yolanda Barcina no es navarra. Es bizkaina. De Portugalete, para más señas. Lo que opine sobre Nafarroa vale lo mismo que la opinión de un Magyar.
Lo que es una chorrada es lo que tú dices sobre la sexta merindad. El ignorante desprecia lo que desconoce.
«Los navarros somos vascos cultural y socialmente; que lo seamos políticamente para mí es algo accesorio»
Patxi Latorre ha recopilado en un libro citas que demuestran que Navarra ha formado parte de la realidad vasca desde sus orígenes. Asimismo desvela algunas claves para entender qué y quiénes han empujado a muchos navarros a no considerarse vascos
ELENA URABAYEN – Lunes, 5 de Marzo de 2012 – Actualizado a las 05:10h
PAMPLONA. Afirma que le produce «desazón» que, en contra de las evidencias históricas, buena parte de los navarros no se consideren vascos y que esa «rabia» de tener que estar siempre explicando algo «tan natural como que por ser navarro soy vasco» le animó a publicarGu gaurko euskaldunok, historia de un robo, resultado de varios años recopilando citas que refuerzan su argumento.
¿Por qué afirma en el libro que es un robo el hecho de que algunos navarros rechacen que son vascos?
Porque la palabra vasco nos ha acompañado toda la historia, era el segundo de nuestros nombres o el primero, según se mire, y de pronto, hace cosa de 30 años, alguien decidió que esa palabra no nos correspondía, que no teníamos derecho a utilizarla y que éramos navarros a secas. Para mí eso es un robo, nos han robado uno de nuestros nombres y lo peor es que lo han hecho con la complicidad de la víctima, porque los navarros hicimos muy poco por defender o por oponernos a ese robo.
¿De dónde viene el rechazo que algunos navarros sienten si se les considera vascos?
Lo que ocurre es que se parte de una confusión que pasa por considerar que ser vasco es ser ciudadano de la Comunidad Autónoma Vasca. Aunque Navarra y la CAV sean comunidades diferenciadas, los ciudadanos de ambas compartimos la naturaleza cultural y social y un nombre, el de vascos. El problema es ese: confundir ciudadano de una comunidad política determinada con el hecho de ser culturalmente y socialmente vasco. De ahí parte todo. Hubo quien vio ahí un filón y se aprovechó de esa confusión.
El asunto del que trata su libro es menos valorado por mucha gente por ser algo del pasado…
Parece que ese divorcio entre lo navarro y lo vasco es algo muy antiguo, pero en realidad te pones a mirar los hechos históricos y te das cuenta de que esa pérdida del nombre vasco es muy reciente. Ese divorcio es más reciente de lo que la mayoría de la gente cree. De hecho hay gente que no sabe que al poco de morir Franco se discutió la posibilidad de que Navarra se integrase en con Vascongadas en un régimen autonómico común. No formamos parte de la CAV casi casi por casualidad, porque alguien decidió que estábamos mejor solos, pero es algo reciente.
En este rechazo a considerarse vascos ¿entra en juego el miedo a quedar rebajado o perder importancia si se compara con la CAV?
Sí, pero más que un miedo hay un interés y quienes tienen ese interés se aprovechan de ese miedo. Se puede ser perfectamente vasco, considerarse vasco y al mismo tiempo defender que Navarra permanezca como una comunidad diferenciada. No está reñido, aunque nos han vendido la historia de que no puede ir junto porque les interesaba, pero no es así.
UPN es uno de los principales causantes de la creación de este sentimiento antivasco. ¿Cuál ha sido su papel en todo esto?
A UPN le interesaba que no se produjese la unión de Navarra al ente político vasco porque así como el PNV tiene implantación en los cuatro territorios, UPN no y si Navarra se hubiera incorporado al ente autonómico vasco habrían quedado en franca minoría, no habrían tenido ninguna posibilidad de acceder al Gobierno central, como mucho tendrían la Diputación foral. Simplemente es una cuestión de interés político, ellos preferían seguir solos porque siguiendo solos tenían bastantes posibilidades de gobernar, y la experiencia demuestra que así era, estando solos tienen posibilidad de gobernar.
También menciona en el libro que el nacionalismo ha contribuido a que los navarros asuman que no son vascos. ¿En qué sentido?
Los nacionalistas pensaban en conjunto. No supieron entender que Navarra, aun siendo un territorio vasco, tiene una personalidad muy pronunciada, que no merecía ser tratada como una provincia más aunque solo fuera por historia. Creo que no le prestaron demasiada atención y que antepusieron los intereses del conjunto a los intereses de Navarra. Tuvieron una actuación torpe que sirvió a los navarristas para ponerlo en su contra.
En relación al partido socialista habla en su publicación de traición. ¿A qué se refiere?
El PSOE fue quien inclinó la balanza a un lado. En el arranque de la transición los socialistas estaban integrados en el PSE, portaban ikurriñas y por ejemplo Urralburu y Arbeloa decían que éramos vascos y que lo lógico sería que Navarra se integrase en el ente autonómico vasco. Un poco antes de 1982, cuando se constituyó el PSN, cambiaron de discurso y renunciaron a la incorporación.
¿Por qué se dio ese cambio?
No sé si fue un consejo o una imposición de Madrid, viendo que de esta manera podían conseguir más votos para ser una alternativa a la derecha. El PSN giró 180 grados su postura y si en el comienzo de la transición había posibilidades de que los ciudadanos de Navarra, además de cultural y socialmente vascos, formaran parte de un ente administrativo vasco, en el momento que el PSOE cambió de postura aquello se truncó y ya dijimos, parece que definitivamente, adiós a la posibilidad de integrarnos en un ente común.
¿Ha sido la cultura vasca la pagana de estas decisiones políticas?
Básicamente sí, la cultura ha sido la primera víctima. Cuando yo digo que los navarros somos vascos estoy hablando de un ámbito cultural. Lo otro, que seamos políticamente también vascos, para mí es algo accesorio, sería cuestión de consultar a los navarros. La decisión política ha repercutido en el tema cultural y parece que al no ser vascos políticamente le ha sucedido que renunciemos a ser vascos también en lo cultural. Ese es el gran drama, que haya pagado sobre todo el euskera, que es la seña más importante de la cultura vasca y que a todo lo que suene a vasco culturalmente aquí se le reciba con uñas.
¿Cómo valora la actitud de los grupos más navarristas con lo vasco?
Me parece tremendo, triste y me pregunto si en algún momento, en años próximos, ahora que las cosas están cambiando, cesarán en esa actitud de rechazo abierto, de persecución.
¿Qué cuerpo se le queda a uno después de recopilar tanta documentación y ver que una parte importante de la población navarra continúa renegando de ser vasca?
Cuando arrancó el libro tenía el convencimiento y el instinto de que éramos vascos, lo que no sabía es que era tan fácilmente demostrable o que había tantas evidencias en tal sentido. Cuando he reunido tal cantidad de evidencias y he visto que es algo tan obvio, que está al alcance de cualquiera, la rabia que me empujó a escribir el libro se ha hecho mayor.
De todas la citas que ha recogido, ¿con cuál se quedaría?
Me quedaría con dos que tienen más de cien años pero son vigentes hoy en día. Víctor Pradera, en 1919, escribía: «Las regiones vascas son iguales. Solo hay entre ellas una diferencia: la del poder de la riqueza, que es el de la hegemonía. He aquí una de las razones por las que me asusta la unión. Me asusta porque entonces la hegemonía sería de Vizcaya. Y como en Vizcaya ejercen dominación los nacionalistas resultaría que todos estaríamos sujetos a ellos». También Gregorio Iribas en 1893, dijo «¿No se ha visto siempre la conducta astuta y cautelosa del Gobierno procurando desunir al pueblo vasco-navarro; sembrando entre ellos discordia e intentando crear diferencias para que la envidia y el recelo surgieran en la noble y laboriosa raza que puebla el territorio común? Sepan que Euskalerría es siempre una».
Buruaga,
No me extraña que en el PNV haya tanto listo.
[…] Posted on 09/03/2013 by LaVerdadOfende « Entre la prudencia y la cobardía, se impone la propaganda. Deportistas vascos en los juegos olímpicos de verano de la era moderna » […]