Estoy escribiendo desde Maputo, la capital de Mozambique. He llegado a las 7,00 horas de esta mañana -el post se ha insertado el domingo a primera hora, pero fue redactado el sábado por la noche- en un vuelo de la compañía TAP procedente de Lisboa. Han sido casi doce horas de viaje y el cuerpo acusa el exceso. Y si al largo vuelo nocturno se le añaden los dos diurnos que tuve que hacer durante la jornada de ayer -uno de Bilbao a Madrid y el otro desde la capital de España hasta la lusa- no resulta difícil darse cuenta de lo resentidos que pueden estar mis ya bastante gastados huesos.
He venido, inesperadamente -fue una posibilidad que se me abrió, por sorpresa, a última hora-, acompañando a dos diputados -Carmen Montón del PSOE y Jordi Xuclá de CiU- y una senadora -Elvira Velasco, del PP- en un viaje organizado por la Cruz Roja y la Federación de Planificación Familiar Estatal, ambos miembros de la Alianza Europea contra la Malaria, para analizar in situ la intensa y meritoria labor que estas instituciones están desarrollando en África para la erradicación de este mal endémico que tan alto coste está suponiendo para el Continente negro en términos de sufrimiento humano y desarrollo social.
A nosotros, los europeos, el término “malaria” nos evoca algo muy remoto, en el tiempo y en el espacio. Y así es. Hace ya muchos años que, afortunadamente, se erradicó en nuestro Continente. Pero el mundo no se agota en los confines europeos. Más allá de Europa hay mucha vida humana, que tiene, también derecho a desarrollarse con dignidad y calidad. Y este tipo de males endémicos constituyen un obstáculo serio y a veces insalvable para la satisfacción de ese derecho.
La malaria es una enfermedad devastadora que afecta a un 40% de la población mundial, poniendo a 3.200 millones de personas en riesgo en 107 países. Mata a un menor cada 30 segundos y a unas 3 millones de personas al año, la gran mayoría de ellos, en los países más pobres del África Sub-Sahariana. Es una vergüenza que en pleno siglo XXI muera tanta gente por una enfermedad que es posible prevenir, tratar y curar.
Mozambique es uno de los países que más intensa y dramáticamente padece la enfermedad. Por eso se ha elegido como destino de la expedición. Como fue colonia portuguesa, la lengua oficial de Mozambique es la lusa, que coexiste con un amplio elenco de hablas locales.
El programa de trabajo incluye contactos con parlamentarios mozambiqueños, con las autoridades sanitarias de la República -incluido el propio ministro de Salud Pública- y con los responsables de algunos de los proyectos que mejores resultados están dando en la lucha contra la malaria, lo que incluirá visitas a hospitales y a centros de investigación.
Me ha costado bastante alterar la agenda de trabajo que tenía prevista para la semana que viene -he tenido que cancelar algunos compromisos y posponer otros- pero creo que el esfuerzo merece la pena. El viaje, por lo demás, requiere un sin fin de cautelas higiénico-sanitarias que, obviamente, cumplo con todo rigor. Hay que vacunarse contra la fiebre amarilla, las fiebres tifoideas, la hepatitis A y B y el tétanos. En algunas zonas es recomendable también la vacuna contra la rabia. Y como no se ha descubierto aún la vacuna que permita frenar de raíz la propagación de la malaria, hay que administrarse una pastilla diaria de Malarone y rociarse el cuerpo con un spray antimosquitos extrafuerte -el prospecto dice que está reservado para situaciones extremas- ya que son estos insectos los que transmiten la enfermedad a través de sus picaduras.
Como hoy no es día laborable, por la mañana hemos plantado cara al cansancio del viaje para visitar un mercado de artesanía de madera, que se celebra, al parecer, todos los sábados. Por la tarde hemos asistido a dos recepciones: Una con la responsable local de la Cruz Vermelha de Mozambique, que se apellida Teixeira, como el famoso navegante portugués, y el otro con el embajador, Juan Manuel Molina Lamothe, un sevillano simpático y muy profesional, nieto de una alavesa apellidada López de Arroiabe que, entre otras muchas canciones vascas, le enseñó el Gernikako Arbola y el Eusko Gudariak, que todavía recuerda. En la residencia del embajador me han pasado el dossier de prensa que diariamente se les remite desde la Secretaría de Estado de Comunicaciones y me he enterado del atentado que ETA ha intentado llevar a cabo en Hernani y de la invectiva que Cospedal nos ha dirigido al PNV y el PSE con ese motivo: A su juicio, actuamos con conformismo. Ya empezamos. Ya se nota la proximidad de las elecciones.
Incorporo al post una fotografía que he sacado esta mañana a una joven negra que vendía una fruta de piel rosada, muy típica de Mozambique, que se denomina Lichi. Es una fruta de verano -que aquí es la estación de las lluvias- con un sabor y una textura que recuerdan a la uva blanca, aunque en el corazón no tiene pepitas, sino hueso.
Josu.Creo que te traicionó el sub consciente.La capital creo es Maputo,no Malabo.Malabo es la de Guinea.
Estos viajes parlamentarios son muy interesantes ya que tu,en condiciones normales,jamás irías a Mozambique y sin embargo estás alli descubriendo una realidad fantástica.Paises ricos esquilmados por nomenclaturas corruptas que solo se ocupan de ellos.
Lo del embajador es muy sintomático y recurrente.Si tienen un familiar vasco,aunque sea en el septimo grado,siempre te lo sacan.
Por aqui lo de Cosperal es lo de menos,aunque bastante asqueroso.La tenemos de senadora y es una señora extraordinariamente antipática.Lo de mas es como los de EA han apoyado,uno de ellos,la remoción del alcalde de ANV de Azpeitia y el otro,ha votado en contra.Cada vez se parecen mas al Partido Comunista de las Tierras Vascas.Y,en Azpeitia no pueden hablar contra la ley de partidos ya que Rubalcaba les dejó presentarse en esa plaza.Todo se limita a gritar como borregos,»PNV,español».
Cuando vuelvas verás el lío que le ha organizado Pedro J.a Soraya a cuenta de unas fotos y una entrevista sacada de tiesto.Muy mal tiene que andar un político para caer tan bajo.Nunca me ha gustado esta marisabidilla,pero creo que esta metedura de pata la va a perseguir porque denota exhibicionismo,falta de sindéresis y una ingenuidad impropia de una portavoz.
Para tu gobierno.
Urkullu de alguna forma te desautoriza en relación con lo que dijiste en los Desayunos de TVE.Hoy domingo en el Correo ,Barriuso le pregunta:
Esta misma semana,Josu Erkoreka,dejaba abierta la puerta,aunque sea mínimamente,a un posible apoyo del PNV al PSE si es para garantizar la estabilidad del pais.¿Lo suscribe?.
Erkoreka pudo decir eso en un contexto determinado pero no responde ni a la reflexión ni a quien tiene que tomar las decisiones.
¿Y advertir a Zapatero de que se olvide de su apoyo si,ganando el PNV,les desaloja del poder ¿no es poner la venda antes que la herida?.
Si pero no comparto ese planteamieto.No hay nada que nos una al PSOE ni tenemos ningun compromiso.Creo que fue un desliz».
Conclusión:no te metas en jardines.En Mozambique estás muy bien.
esta bien recordar este tipo de situaciones fuera del periodo de navidad , al parecer única época propicia para agitar conciencias, Por lo demás son muchas las personas que andan por ahí, sean de la ideología que sean , que hacen una labor fructifera , callada y llena de sacrificios con la unica esperanza de que llegue ayuda a esas tierras sea del partido que sea. Gente que no conoce de barruntamientos políticos.Es loable el viaje realizado e independientemente del tramite y cansancio sufridos, a ver si en algún programa de estas elecciones vemos un apartado dedicado a los que vienen de esas tierras, a las ayudas que podamos aportar, a la formación y apoyo para los que quieren ir a ayudar…..
Kaixo Josu:
En primer lugar, me alegro de tu viaje a Mozambique, está muy bien lo de ver otras realidades. Espero que sea algo gratificante para ti esa experiencia. En mis tiempos más jovencitos, estuve comprometida en mi diocésis yendo en verano a sitios pobres para echarles una mano. Casi estuve a punto de ser misionera, pero las circunstancias de la vida me cambio esa inquietud.
Por lo demás, casi es mejor que estés fuera porque para lo que se ve en política en el Pais Vasco, siempre es más de lo mismo.
Ayer me vía Políticamente Incorrecto y todo los partidos representados, parece ser que lo habían hecho bien, unos echando sapos y culebras contra otros partidos y así como siempre. En fin un aburrimiento. Aquí como era de esperar, la crisis económica se está comiendo a pasos agigantados Euskadi. El paro llega a mas de 100.000 personas y las empresas y los bancos hacen con el dinero lo que les da la gana. Vamos que está de risa la cosa. Así que lo único que te puedo decir, disfruta de esa experiencia, que seguro algo positivo sacarás.
Besarkada handi bat!!
Epa Josu:
Qué bien que estás en Mozambique y con tu bitácora nos sacas de lo aburrida que está siendo la pre-campaña electoral.
Queridos amigos, ya he regresado. ¡Y qué razón teníais! En Euskadi, las cosas, siguen estando básicamente como las dejé.
Un saludo a todos/as