Son una inmensa máquina propagandística. Algo ciertamente admirable. No hacen nada que no esté orientado hacia la venta pública; venden todo lo que hacen; lo venden bien y cuentan, además, con la complicidad de una amplia red de medios de comunicación que, cuando se equivocan, les ponen red para que no se estrellen contra el suelo y cuando aciertan, multiplican con especial denuedo los efectos publicitarios de lo que hacen y dicen. ¿Se puede pedir más?
Me refiero, obviamente, al Gobierno del PSOE que, de un tiempo a esta parte, se está convirtiendo en una de las más poderosas herramientas de manipulación de la información y de la opinión pública. Su actuación en torno al secuestro del atunero «Playa de Bakio» y su posterior liberación, les consagra como unos auténticos maestros en estas lides.
He denunciado reiteradamente, en este blog y fuera de él, la indiferencia con la que el Gobierno afrontó desde un principio, las iniciativas que desde el PNV se presentaron en el Congreso para promover la seguridad de las embarcaciones atunero-congeladoras que faenan en el Índico. Cuando le pregunté sobre el particular, Zapatero me respondió que nuestras pretensiones eran desproporcionadas. La Resolución parlamentaria que les obligaba a enviar una fragata a la zona conflictiva, la incumplieron con todo descaro, dando cuenta, una vez más, del escaso respeto que profesan por la centralidad del Parlamento. Y ante nuestra insistencia para que tomaran cartas en el asunto, implicando en la resolución del problema a los foros multilaterales en los que participa el Estado español, nos dijeron que sí, pero los meses han transcurrido inexorables, sin que se hayan tomado la más leve molestida de actuar con la responsabilidad requerida.
Eso sí, ahora que el peligro sobre el que alertábamos se ha hecho realidad, se ponen ante las cámaras de televisión, para retransmitir en tiempo real todos y cada uno de los gestos que están realizando, con la evidente pretensión de transmitir la imagen -falsa imagen- de un Gobierno responsable y eficaz.
Hace seis meses era imposible enviar una fragata al Indico. Era caro e ineficaz. Ahora, sin embargo, lo hacen, con un gran despliegue mediático, que nos informaba, casi a la hora, sobre la ruta y la misión que llevaba.
Antes era complicado implicar a la Unión Europea en la resolución de este problema. Nos decían que las estructuras comunitarias eran tan herméticas y burocráticas que resultaba poco menos que imposible colar una cuestión de este tipo en su agenda. Y debido a ello, lo único que había hecho el Gobierno era pedir a la europarlamentaria socialista Rosa Miguélez que, junto a Josu Ortuondo, europarlamentario del PNV, formulase sendas preguntas dirigidas al Consejo y a la Comisión, interpelándoles sobre su disposición a tomar medidas para velar por la seguridad de los pesqueros comunitarios que faenan en el Indico.
Eso está bien. Está bien, sobre todo, para un partido como el PNV que no tiene presencia directa en los órganos que conforman el ejecutivo comunitario. Pero el PSOE es el partido que gobierna en España. Y España es un Estado miembro de la Unión Europea, que envía representantes a todas las sesiones del Consejo: a las generales y a las sectoriales. Lo que el Gobierno tenía que haber hecho para actuar con un mínimo de diligencia, era hacer valer su condición y forzar la incorporación a la agenda del Consejo del problema de la seguridad de las embarcaciones comunitarias que trabajan en los mares que rodean al cuerno de Africa. Pero no hizo nada de esto. Y ahora que el problema le ha estallado en la cara, llena los teletipos con informaciones -vaya usted a saber si ciertas o no- que dan cuenta de las intensas gestiones que está llevando a cabo con el fin de recabar la implicación de la Unión Europea en la resolución de este grave problema. El secretario de Estado, Diego López Garrido, declaró ayer a los medios que había pedido a los veintisiete que se implicasen en la creación de una fuerza naval «contundente y disuasoria» contra la piratería.
¿No era posible hacer todo esto hace seis meses? Claro que era posible. Lo que ocurre es que al Gobierno no le apetecía hacerlo, o prefería invertir su tiempo y su esfuerzo en otras cosas. ¿Porqué los países que están trabajando en la ONU para la elaboración de una normativa que permita afrontar con eficacia el problema de la piratería en alta mar no contaban con España? La respuesta es clara. Porque España nunca se había presentado en los foros internacionales como un país preocupado por este tema, por mucho que el asunto se estuviera debatiendo en el Congreso de los diputados a instancias del PNV.
En este asunto, la irresponsabilidad del Gobierno ha sido supina. Pero ahora, los ministros se sacan todas las fotos posibles. El acto de la liberación fue anunciado por la vicepresidenta el mismo sábado por la tarde, no fuera que los medios de comunicación tuviesen conocimiento del asunto por otra vía y privasen al Gobierno de la baza publicitaria que supone dar la primicia. Al regreso de los marineros, la ministra Espinosa les esperaba en Torrejón de Ardoz, con el evidente propósito de salir en todos los telediarios dándoles la bienvenida. Y a su llegada al aeropuerto de Loiu, les esperaba el delegado del Gobierno en Euskadi, Paulino Luesma. Otra fotografía.
Los que ahora se apuntan al carro, votaron que no, en julio pasado, a la resolución parlamentaria que pedía el envío de una fragata. Diego López Garrido, la Vicepresidenta Fernandez de la Vega, la ministra Espinosa y hasta el propio Moratinos votaron que no. Pero hoy se sacan la foto con los que salieron perjudicados por aquella actitud. Lo dicho, son una inmensa máquina propagandística.
Creo que el nacionalismo democratico se a portado demasiado bien con el PSOE y con su franquicia en la CAV el PSE durante los años de la tregua y no se merece el trato que esta recibiendo. El Lehendakari y los partidos del tripartito han cedido todo el protagonismo al PSOE durante estos años con la esperanza de que se consiguiera la tan ansiada paz , en ningun momento han criticado la politica del PSOE ni han realizado maniobras por su cuenta.
Ahora tenemos que aguantar como el PSOE nos chulea, hoy mismo he oido a un dirigente del PSE decir que el Lehendakari lleva mucho tiempo inhabilitado para dirigir el pais, ayer el secretario general del PSE en Bizkaia, José Antonio Pastor, exigio al PNV que «llame al orden» al alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, por las «descalificaciones» que vertió en el pleno del pasado jueves contra el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento Txema Oleaga y tuvo la desfachatez de decir que: «Euskadi necesita que estas personas que no aceptan ninguna crítica sean sustituidas por otras que respeten todas las opiniones», hace unos dias Odon Elorza decia que el tiempo de pactos con el PNV se habia terminado y que preferia pactar con EB y Aralar, y como estos dia tras dia. Nada podemos esperar de Zapatero y el PSOE y me temo que como dijo Urkullu lo unico que queda es el coche de trenes, destapar toda la mierda del proceso de paz y poner en evidencia las mentiras permanentes de Zapatero, decirles que si ANV esta presente en algunos ayuntamientos es porque al PSOE le intereso en su momento, que si dejaron colarse a EHAK en el parlamento vasco fue por interes partidista del PSOE, que estaban dispuesto a conceder a ETA mucho mas de lo que reclama el Lehendakari.
Lo unico que puede poner nervioso a Zapatero es la perdida de apoyos en el Congreso de los Diputados, si en un momento dado deja de contar con el apoyo del PNV y CIU las va a pasar moradas para seguir gobernando. Pienso que la unica salida es una oposición frontal e intentar desgastar todo lo posible a PSOE de cara a las autonomicas del 2009. como muy bien dice el señor Erkoreka el PSOE solo hace politica de imagen y aunque tenga pocos altavoces, el nacionalismo democratico tiene que llevar al parlameto español una oposicion frontal y tratar de destapar todas las mentiras de Zapatero y su banda.
Josu, supongo que por tu posicion de portavoz no debes hacer declaraciones estridentes. Yo no hablaría de inmensa máquina propagandística. Sería más duro 😉
Entiendo que nos movemos en una sociedad de pactos necesarios. Aunque prefeririamos una Euskadi independiente, de momento tenemos que acetar la situación por el bienestar de todas y todos. Uno de estos pactos consiste en que las leyes que hace el Parlamento de Euskadi son respetadas (si están dentro de lo transferido)por el poder político español y los vascos acetan la legalidad que imponen las Cortes Españolas. Por lo tanto a los vascos les interesa que las instituciones españolas (Justicia, Gobierno, Parlamento)sean honestas, justas y democráticas. En una democracia, yo entiendo, el Parlamento está por encima del gobierno. Como entones si el Parlamento Español decide que se envie una fragata al cuerno de Africa, y no se hace, los diputados no le exigen al gobierno que cumpla esta orden del Parlamento Español. ¿Alguien puede explicar esto?
Tienes razón, Escoin, soy portavoz y debo cuidar las expresiones, aunque no siempre acierte. De lo que he descrito pueden extraerse corolarios mucho más duros que el de la máquina propagandística, pero creo que esta tampoco está mal.
Estoy de acuerdo con Abelardo en muchas de las cosas que incluye en su comentario y, de manera especial con su reflexión inicial de que nos desenvolvemos en una sociedad de pactos necesarios. Así es. Con respecto a la pregunta que formula he de decirle que las resoluciones parlamentarias sólo obligan al Gobierno moral y políticamente. No jurídicamente. Su incumplimiento, por ello, no se puede llevar a los tribunales, aunque puede y debe ser objeto de denuncia política.